Filumena Marturano

Como tomar un buen café, así es Filomena Marturano.

Un abrazo a lo caótico, al delirio, al contraste de la historia amarga y la risa ligera.

Una obra con un ritmo que se sucede de manera trepidante en cuatro idiomas; napolitano, catalán, italiano y español; lo que te permite dejarte llevar desde el primer momento a la bella Italia

Variables como la familia, el deseo, el ruido, el enredo, la fuerza de seguir adelante, la convicción, la esperanza, el engaño, la comprensión… Un verdadero placer para hacer vibrar las emociones.

La puesta en escena es fantástica, sientes que “formas parte” de la obra desde el primer momento. El Teatre La Biblioteca permite la experiencia

La obra, escrita en 1946 por Eduardo De Filippo, no ha envejecido.

Clara Segura sobresale en el papel de Filomena Marturano, la protagonista de esta historia junto al actor Enrico Ianniello que destaca con una presencia arrolladora interpretando a Domenico Soriano

Sin duda, teatro del bueno.

¡Qué bien sienta una sesión de buena comedia teatral! Esa es la sensación que posiblemente se te quede tras ver la historia de Filumena Marturano.

Bienvenida, bienvenido a este relato en el que te adentrarás en cuanto atravieses la puerta de la Biblioteca de Catalunya, perfectamente caracterizada para la ocasión. Este es un espacio que, a pesar de ser un edificio histórico y por lo tanto con poco margen para cambiar «piezas», la Perla 29 siempre sabe aprovechar de manera muy inteligente para sus montajes.

Toma asiento, pues durante más de dos horas, y nada más te aposentes, va a comenzar la hilarante y a la vez tierna historia, contada en napolitano, catalán y castellano, de los motivos que llevan a Filumena Marturano a engañar a Domenico Soriano para casarse con él después de 25 años de engaños, desprecios y negativas por parte de Soriano.

La comedia empieza fuerte: la primera escena ya es un pico de voces, amenazas, patrañas, mentiras y guiños que se repetirán durante toda la obra. Ese es parte de su encanto, no te deja descansar entre risas, clichés y secretos, todo rociado con unas interpretaciones majestuosas por parte de todo el equipo, pero entre los que destacan Clara Segura, que para mí es sello de calidad asegurada, y Enrico Ianniello, un gran descubrimiento (los tics de su personaje son una maravilla con los que no parar de reír).

Sin desvelar mucho más del argumento, esta tragicomedia tiene escenas para todos los gustos, personajes muy arquetípicos y, algo que me gustó mucho, un guiño a la sororidad entre tanta bufonería machuna.

La verdad es que me gustaría dar las gracias a compañías como la Perla 29 que tienen la «valentía», en la era de las novedades de 90 segundos y del ‘usar y tirar’; por recuperar un texto que ya habían representado y dar la oportunidad a quien no lo pudo disfrutar y a quien quiere repetir el viaje con Filumena Marturano a la bella Napoli.

Eduardo De Filippo escribió este texto como una tragicomedia neorrealista situada en el Nápoles de posguerra. Fue su obra más famosa, y el personaje principal ha sido interpretado por algunas de las mejores actrices de cada momento: Katy Jurado, Sophia Loren (Matrimonio a la italiana), Joan Plowright, Judy Dench, Concha Velasco, María Asquerino o China Zorrilla, entre otras muchas. De hecho, el personaje de la ex-prostituta que lucha por ganarse un lugar en el mundo y por dar una seguridad a sus hijos es uno de los más entrañables y carismáticos de la dramaturgia italiana.

No es ningún secreto que La Perla 29 ha tenido desde siempre una gran predilección por los autores italianos y todo el imaginario que los rodea. Sobre todo destaca el amor por Filippo (Natale in Casa Cupiello, Questi fantasmi) pero también por Pirandello (Un, ningú i cent mil, L’home de la flor a la boca) o por Goldoni (La serventa amorosa, L’hostalera), o incluso por referentes cinematográficos muy inspiradores (Una giornatta particolare, 28 i mig). Ahora podemos volver a recuperar esta Filumena Marturano esplendorosa, enorme, que Oriol Broggi ha sabido llevar con inspiración y naturalidad. Es fácil caer en excesos con obras tan representadas o que se prestan a cierto manierismo, pero en este montaje no lo encontraréis. Todo fluye con precisión, con la cadencia de la vida misma, y sin que se pierda emoción o efectividad.

Una gran parte del mérito la tienen los actores, que demuestran –del primero al último- estar en la sintonía que el director les pide. Del talento de Clara Segura no descubriremos ahora casi nada… Su sola presencia levanta cualquier espectáculo, y aquí tiene un vehículo de lucimiento que sabe conducir perfectamente. Además, tiene delante un actor que le da las réplicas con una habilidad estremecedora. El italiano Enrico Ianniello podría ser aquí la estrella invitada de la función, pero se integra perfectamente en el montaje con su increíble dominio del oficio y de la técnica. Su creación en italiano, castellano y catalán quedará, sin ningún tipo de duda, como una de las más destacadas y especiales que se habrán visto en el Teatro de la Biblioteca.

Un espectáculo que nadie se debería perder, ya sea por las interpretaciones, por el gusto en la dirección o simplemente por esta tierna historia que os hará pasar de la carcajada a la lagrimilla en poco rato. Una gran comedia con un emotivo drama detrás.

¡Ay los secretos y las relaciones escondidas! Son un ingrediente muy interesante cuando se trata de historias que atrapan al público, ya sea en un libro, una canción, película u obra de teatro. Que el público sepa cosas que los protagonistas no se huelen o desconocen es la salsa que implica a la espectadora y la hace participar de un enredo que acostumbra a tener la comicidad como aliada.

Filumena Marturano es una mujer que ha pasado 25 años al lado de Domenico Soriano, como pareja extraoficial y también como ama de casa. Después de tantos años ella decide que se ha ganado el derecho a ser la señora Soriano y, con un plan muy ingenioso, lo consigue. Cuando Domenico se da cuenta de todo, empieza el estruendo.

Es una maravilla ir al teatro y reír a mandíbula batiente, y esta obra lo provoca con ganas. Toda diversión, entretenimiento, enredo y estridencia, enloquece al público con un texto rápido y ágil elaborado magníficamente por Eduardo de Filippo en 1946. Alejada en el tiempo, esta historia es trasladada perfectamente a la actualidad sin chirriar ni una sola parte. Con Nápoles como base de la acción, el delirio italiano y el frenesí de las emociones se traslada al escenario con detalle. Oriol Broggi consigue crear el ambiente imparable de pensamientos y diálogos, y, sin darse cuenta, la espectadora ha pasado un poco más de dos horas en un estado alegre y divertido, olvidándose de cualquier otra cosa.

El texto y la puesta en escena es increíble, pero el reparto acaba de redondear una obra especial con un talento descomunal. Clara Segura con una presencia arrolladora explora las líneas de la Marturano con pasión y entrega, respira con su rabia y su amor y, con la inteligencia de persona vivida, transita su personaje con una seguridad impecable.

Es impresionante lo que hace Enrico Iannielo en el escenario. Su dominio del ritmo y la escena se muestra en su capacidad de cambiar de idioma (¡hasta tres!) con una facilidad que solo puede ser fruto de un trabajo laborioso. La naturalidad de Domenico hablando con cada personaje con frases parte en italiano, otra en castellano y de tanto en tanto también en catalán, deja asombrada a la espectadora.

Cada elemento de esta producción está pensado y trabajado al detalle, y de esta dedicación a cada parte de la obra se extrae un resultado agradable y con ganas de compartir. Sin duda, una de las propuestas más atractivas de la cartelera.

Anar al Teatre La Biblioteca, ubicat en una de les naus gòtiques de l'antic Hospital de la Santa Creu, un edifici civil del segle XV, és ja per si, una experiència màgica. Estèticament, l'espai és fabulós, però si a més a més, hi sumem una programació interessant i uns actors fantàstics, l'èxit és del tot assegurat.

Filumena Marturano és l'obra més famosa de l'autor i actor napolità Eduardo De Filippo, escrita el 1946.
Es va estrenar el 1946 al Teatro Politeama de Nàpols, ha estat traduïda a una vintena d'idiomes, se n'han fet dues versions cinematogràfiques i a casa nostra s'ha pogut veure representada al teatre en tres o quatre ocasions.

De fet no és la primera vegada que l' Oriol Broggi s'acosta a Di Filippo, ja que, va portar a escena Dissabte, diumenge i dilluns (com a ajudant de direcció d'en Sergi Belbel), Nadal a cals Cupielo, Questi fantasmi i Filumena Marturano (estrenada en aquest mateix teatre la temporada 20/21 en plena pandèmia).

L'espai d'aquest teatre sempre és molt important en cada una de les obres que s'hi representa. En aquesta ocasió, la seva disposició, juga amb les fronteres entre l'espai real i els espais de ficció, permetent-nos al públic formar part de l'escena i l'acció. Els espectadors, literalment, ens trobem dins del menjador de la casa d'en Domenico i la Filumena. Els vaig tenir a tocar!

A part del meravellós espai d'aquest teatre i la infinitat de possibilitats escèniques, podríem dir que l'èxit de Filumena Marturano, recau en el text i la força dels intèrprets. Oriol Broggi es reafirma de nou, com a gran director escènic amb aquest muntatge. Ha sabut donar-li el ritme i to adequats, i ha guiat amb eficàcia a uns actors magnífics, extraient, en cadascun d'ells, l'essència del personatge.

Tots els personatges tenen una gran teatralitat. Tot i que la Clara Segura (Filumena) i l'Enrico Ianniello (Domenico) són els principals protagonistes, la resta d'actors que conformen el repartiment, no es queden a l'ombra. Absolutament tots destaquen en les seves interpretacions, Marissa Josa (aquesta actriu m'encanta! És divertidíssima!, meravellosa!), Jordi Coromina, Jordi Llovet, Carla Vilaró, Lluís Oliver, Xavier Ruano, Josep Sobrevals i Montse Vellvehí. Sensacionals i del tot creïbles gràcies a la comicitat, companyonia i bon entendre que hi ha entre ells.

Filumena Marturano és un drama neorealista situat en el Nàpols de postguerra, a finals de la Segona Guerra Mundial. La Filumena, juntament amb Domenico, són els protagonistes principals, tot I que és ella qui porta l'acció de l'espectacle, la que es guanya al públic i la que aconsegueix posar-se'l de la seva banda.
La Filumena és un personatge que ens agrada. Ella és una dona sincera, enèrgica, vitalista, apassionada, plena d'humanitat. Una dona que es fa valdre. Una dona que lluita per tirar endavant en un món dominat pels homes. La Filunena és una dona valenta, forta; una dona que tot i que no ha tingut una vida fàcil, és una persona amb principis i que l'únic que reclama és el lloc que li correspon.

Filumena Marturano és una obra que ens parla d'amor i desamor, de venjança i supervivència.

És difícil definir si es tracta d'una comèdia o d'un drama, ja que és una obra en què rius molt, però a la vegada hi ha un rere fons que remou i emociona.

Passar de la comèdia al conflicte argumental, és un dels atractius d'aquesta obra.

A mi em va agradar molt!, així que animo a tots aquells que no l'hàgiu vist, que hi aneu.
No us la deixeu perdre!

Filumena Marturano ens connecta amb Nàpols, amb l'italià (quin esforç per recrear-ne l'accent dialectal identificant-lo amb el català; i l'estàndard, amb el castellà) i amb patrons de vida que potser es podrien considerar ancestrals. Filumena Marturano també és una simfonia de veus, de personatges (alguns plans; la majoria, molt ben perfilats), de riures i, en resum, de molt bon teatre. Filumena Marturano és una de les grans produccions de la companyia La Perla 29, que em porta a fer una reflexió: els guions escrits per autors del Mediterrani (en aquest cas, d'Eduardo de Filippo) els hauríem de considerar molt més. I amb aquesta idea no vull malinterpretacions, perquè és clar que hi ha autors dels set mars imprescindibles de conèixer i d'interpretar, però subratllo que les obres italianes les hauríem de tenir més en compte.

I dit això, anem al gra. L'actriu Clara Segura és la Filumena Marturano, una dona que no va poder ni aprendre a llegir ni escriure, que va haver de deixar casa seva quan tenia 17 anys, per malviure com a prostituta, i que lluita per aconseguir formar una família amb l'home que ha estimat durant vint-i-cinc anys. Ai las! L'home, Domenico Soriano, (atenció, una de les interpretacions més magnífiques, interpretat per Enrico Ianniello) no s'ho havia plantejat mai. La vida relaxada d'home amb una bona posició econòmica, l'havia portat a viatjar per tot el món, sense lligams, perquè sempre havia pensat que era la millor manera de relacionar-me amb el món. En aquest punt, hi faig una pausa en l'explicació de la trama. La Perla 29 és capaç de cuidar tant tots els detalls de les obres que representa a la Bibilioteca de Catalunya, que darrere de la porta dels lavabos penja en petits rètols frases cabdals que després els espectadors escoltaran durant la representació. Jo vaig tenir la sort de llegir-hi: "O sigui que jo he dedicat tota una vida a lluitar per formar una família, i ara la llei no m'ho permet? Això és justícia?".

Tot plegat, té lloc al menjador d'una casa napolitana, en què hi ha servei (tres persones que s'encarreguen del manteniment de la casa), en què les flors no hi falten (les roses vermelles amb molt de significat!) i en què els espectadors tenen la sensació d'estar més a prop que mai en aquesta llar en què s'explica la vida d'una dona que té bons sentiments, molt de sentit comú i que diu frases que no s'obliden: "Els fills són fills", i bé que s'ho acabarà creient i ho assumirà Domenico Soriano. Així doncs, la millor recomanació final que puc fer és que hi aneu. Entreu al menjador napolità situat dins d'una part de les instal·lacions de la Biblioteca de Catalunya, en aquell espai tan bonic del Raval de Barcelona, on t'obren la porta que toca al carrer d'Hospital de Barcelona, perquè se n'hagin anat tots els espectadors la tancaran tot seguit. Moltes gràcies, La Perla 29 per donar-nos l'oportunitat una vegada més d'escoltar la Filumena!

La Perla 29 nos ha ofrecido este verano una Filumena Marturano que ya tiene nominaciones en Teatre de Barcelona.

Aunque Eduardo De Filippo ha sido llevada a la escena catalana con títulos como “La gran il·lusió” (1988), “L’art de la comèdia” (1992), “la Filumena Marturano” (1995) “Dissabte, diumenge i dilluns” (2002) o “Questi fantasmi” (2010) y algunas más, ha sido injustamente poco representado en comparación con otros dramaturgos del siglo XX a pesar de ser uno de autores más prolíficos del siglo pasado.

Tuvimos la oportunidad de ver en streaming un ensayo abierto de la obra. Me sorprendió y fascinó la manera de dirigir de Oriol Broggi. Paraba la representación con gran discreción como pidiendo perdón, sugería más que corregía y pedía opinión a todos los intérpretes sobre una frase determinada de alguno de ellos. Esta dirección tan cuidada y participativa hace que el resultado de la obra de Filippo sea impecable.

Broggi que además de director es el escenógrafo de la pieza, mueve la preciosa sala de la Biblioteca de Catalunya con su maestría habitual. Con un inmejorable aprovechamiento del espacio, crea una disposición escénica que permite una entrada de servicio y la posibilidad de subir a la parte noble de la casa de Soriano. Desde los muebles hasta la iluminación de Pep Barcons, todo envuelve elegantemente las palabras de Eduardo de Filippo.

Como muchas obras de este autor, Filumena es una pieza cómica pero también dramática. Como es habitual en él, es capaz de mantener todo el rato la comicidad y hacer una crítica mordaz del papel de la mujer a principios del siglo pasado. Filumena, exprostituta y mantenida por un acaudalado napolitano es despreciada, humillada y tratada como a una sirvienta durante 25 años durante los cuales ha ayudado a sus hijos, a escondidas, con el dinero de Domenico. Él, mientras tanto, va teniendo otras amantes más jóvenes y ella trama su venganza simulando una muerte próxima que lo incita a casarse “in articulo mortis”.

Como si de la Caballé cantando su famosa Casta Diva se tratara, el monólogo de Filumena (imponente Clara Segura) explicando los motivos de su engaño, provocó un silencio en la sala que se podía cortar. Era tal la emoción por su magnífica interpretación que, en un teatro de ópera, el público hubiera pedido un bis. A pesar de ser una obra de Prima Donna, Enrico Ianniello, borda el papel de amante, marido engañado y hombre rico napolitano. El trabajo de la pareja es formidable. Los hijos que aparecen más tarde son Jordi Llovet (el camisero elegante), Josep Sobrevals (el honesto obrero) y Sergi Torrecilla (el poeta inseguro).

Los demás intérpretes secundarios son el abogado (Xavier Ruano), Eduard Muntada, Montse Vellvehí y Carla Vilaró. Todos mantienen de manera brillante la fuerza cómica y dramática de la obra. Marisa Josa, la madre en “La reina de la bellesa de Leenane” es ahora la criada fiel, eternamente agradecida a la señora que la acogió a su servicio en un momento de mucha necesidad.

Broggi saca provecho de todo y de todo el mundo haciendo que la pieza sea más fresca y participativa. Incluso él mismo o los técnicos desde su cabina intervienen en algunas escenas.

Al aire queda el final de Filumena. Queda abierto a cada uno de nosotros. Podemos volver y pensar tantos finales como nos plazca. En setiembre vuelven.

«¡¡Shhht!!», manda callar Renato Carosone cuando se apagan las luces en la Biblioteca de Cataluña. El músico napolitano tenía esta original manera de comenzar sus canciones humorísticas. «Canta Napoli matrimoniale»: suena la música alegre que te transporta a una controvertida noche de bodas en una casa burguesa del sur de Italia. Clara Segura brilla como Filumena Marturano, la protagonista de la comedia más popular de Eduardo de Filippo (1900-1984), papel que también interpretó la Sophia Loren a la memorable adaptación cinematográfica Matrimonio a la italiana (1964) acompañada de Marcello Mastroianni.

Marturano es una prostituta que, después de 25 años emparejada y conviviendo con el rico y promiscuo Domenico Soriano, urde un plan para casarse con él ante su negativa ( «el anillo pan cuando«) y conseguir el estatus y la honor que no le ha otorgado, así como un apellido (y una herencia) por sus hijos secretos. La comedia comienza in media res, cuando se destapa el pastel del engaño. Domenico, interpretado por Enrico Ianniello (uno de los grandes descubrimientos del montaje) descarga su furia contra la nueva esposa, que se acaba de levantar digna y vivísima pero con el corazón abatido, de su lecho de muerte. El abuchea alternando el napolitano, el catalán y el castellano, un puntazo.

La obra empieza fuerte y no para. Dirigida y ambientada con maestría por Oriol Broggi, alterna momentos de gran carga emocional (no desees nunca que alguien te mire a los ojos y te amenaza de muerte como lo hace la Filumena); y pasajes francamente hilarantes, gracias a la química entre el tándem protagonista y un maravilloso reparto que regala una colección de personajes secundarios que hacen brillar cada segundo de la pieza. Son también destacables los momentos de sororidad promovidos por las criadas (brillantes Marissa Josa y Montse Vellvehí). Saboteadoras a la sombra del patriarcado de Soriano, no sólo ayudan a Filumena a conseguir sus propósitos, también subrayan la lucha por la dignidad de la protagonista en medio de los equívocos vodevilesco en que transcurre la obra.

La Filumena Marturano de La Perla 29 divierte, emociona y te transporta a Italia. Se puede pedir más?

«Que bonito es llorar», dice la Filumena, antes del oscuro. Que bonita es una noche de teatro bien hecho.