Es injusto cuando se supone que los cuidados y la responsabilidad afectiva recae irremediablemente en manso de alguien que no lo ha pedido, pero a quien la consciencia y el deber interno le dicen que se tiene que hacer cargo de una situación que no ha provocado. Más injusto es aún que aquellos/as que se acomodan a esta situación no tengan ni la decencia de pensar, por un momento, que tendría que facilitar las cosas y agradecer el sacrificio que está haciendo la otra persona para cuidarlas. El Refugi es el lugar que Amy ha creado para sus hermanos después de la huida de sus padres. Unos progenitores que no pudieron ni quisieron afrontar los problemas, ni buscar soluciones, y […]