Sopa de pollastre amb ordi (Sopa de pollo con cebada) es el plato más típico y frecuente de la familia Khan. Una comida de subsistencia para esta familia obrera inglesa, protagonista del último espectáculo producido por La Perla 29, que podremos ver en la Biblioteca de Catalunya a partir del día 14 de febrero.
En la única localización del comedor del domicilio familiar, descubriremos la historia de esta familia, durante 20 años; desde el 1936, coincidiendo con la manifestación antifascista del barrio obrero londinense de East End, hasta el 1956, año del levantamiento anticomunista de Hungría. El implacable paso del tiempo provocará la progresiva degradación de las convicciones, sueños e ideales políticos de cada uno de los miembros de la familia, en paralelo a la desintegración y fragmentación del núcleo familiar.
EL TEXTO
Ferran Utzet (- director- ,Dansa d’Agost, Un obús al cor) y Llàtzer Garcia (Els nens desagraïts, La Pols) adaptan este texto escrito en 1958. El autor es el dramaturgo inglés Arnold Wesker, miembro destacado de los ‘jóvenes airados’ (Angry Young Men), colectivo que protagonizó una revolución artística en los años 50, con sus textos teatrales sobre la decepción ideológica de las clases populares de la Inglaterra de posguerra. Utzet, también director de este montaje, explica que una de las cosas que más le cautivó de la obra, es que no se queda en la descripción de los síntomas de un conflicto en el presente, sino que se sumerge en las raíces, en el pasado, para acabar construyendo una perspectiva vital familiar de 20 años.
QUIÉN ES QUIÉN?
Los personajes de Sopa e pollastre amb ordi son 7 miembros de una familia que un día lucharon juntos para construir un mundo mejor. Harry (Lluis Villanueva) es el padre de la familia Khan, con convicciones profundamente comunistas. Sarah (Màrcia Cisteró) es la madre, uno de los personajes más fuertes de la familia, y más fiel a sus ideologías. Ada (María Rodríguez) es la hija, y está casada con el Dave (Josep Sobrevals), soldado que encadena la Guerra Civil en España con la II Guerra Mundial. Ronnie (Pol López) es el hijo, refugiado en el arte y la vertiente más intelectual de la política. Cissie (Míriam Alamany), es la tía, la hermana de Harry, y Monty (Ricard Farré), es el amigo de la familia.
TODO EN UN COMEDOR
Después de albergar una auténtica Trattoria italiana de los años 60 ‘con La Hostalera, o con el inquietante espacio diáfano de Bodas de Sangre, la nave gótica de la Biblioteca de Catalunya acoge esta vez un espacio escénico más reducido al que estamos acostumbrados: el comedor de la casa de una familia obrera. 16 m² que serán el único campo de juego dramatúrgico para la evolución temporal de la historia. El director Ferran Utzet apela al espectador activo, que será capaz de decodificar todos los mensajes en relación a las elipsis temporales que ofrecerá la escenografía y el trabajo gestual de los mismos actores.
EL PARALELISMO CON LA SITUACIÓN POLÍTICA ACTUAL
Ferran Utzet reconoce que la situación política actual que vive Cataluña resuena inevitablemente en la obra, aunque no ha habido en ningún momento una voluntad de politizar la pieza. Los hechos de octubre de 2017, así como su evolución a principios de este 2018, llevan, en palabras de Utzet, a pensar que la idea de que la obra pueda enviar un mensaje claro de ánimo o desánimo le parece ingenua. Pero en cambio, cree que es necesario representar la obra, y hacerlo en este momento, ‘porque el teatro, cuando es teatro de verdad, puede hacernos sentir que no caminamos solos’.
(Fotos de ensayo: Mónica Molins)