Sinopsis
El Teatre Nacional de Catalunya ha encargado a tres nombres destacados de la dramaturgia contemporánea que exploren el concepto de «frontera» desde sus respectivas poéticas. El resultado es una trilogía que reúne en un único espectáculo las voces del argentino Rafael Spregelburd, el alemán Falk Richter y la catalana Lluïsa Cunillé.
Santa Cecília de Borja a Saragossa, de Rafael Spregelburd
En una universidad de una pequeña ciudad en la frontera entre Francia y Bélgica, un catedrático francés y una profesora belga discuten sobre cómo conceptualizar la «restauración» del Ecce Homo de Borja según los cánones del arte contemporáneo. El apasionamiento de esta controversia planteada por Spregelburd conseguirá saltar volar por los aires todo tipo de fronteras, artísticas, lingüísticas o geográficas.
“…Les estamos dando una versión tamizada por nuestra experiencia, que es la experiencia social de hace cinco minutos, pero no la de mañana miércoles, no la del año próximo, no la del siglo que quizás convertirá a Cecilia Giménez y a su aventura fortuita en la vara de medir la calidad de un Da Vinci, de un Duchamp, y se burlará de nosotros y de esta pobre cátedra en una ciudad de provincias…”. (Rafael Spregelburd, Santa Cecilia de Borja a Saragossa)
Frontex, de Falk Richter
En un moderno barrio amurallado para protegerse de un exterior inestable y peligroso, una pareja discute sobre el desencanto laboral del hombre de la casa, el cual corre el riesgo de provocar la expulsión inminente de este paraíso de la tranquilidad. Con este texto, Falk Richter pone el acento en los peligros de esclavitud laboral que pueden esconderse tras el mundo que ahora estamos construyendo.
“La gente como nosotros debería estar contenta de haber conseguido llegar hasta aquí, quizás este no es nuestro sitio, no formamos parte de ello, y ellos se dan cuenta, se dan cuenta… se dan cuenta de que no hay nada que provoque alegría, y lo viven como una muestra de ingratitud, con todo lo que te han ofrecido, te han dado un puesto de trabajo, te han ayudado a crecer poco a poco.” (Falk Richter, Frontex)
Geografia, de Lluïsa Cunillé
En una carretera secundaria, una mujer ayuda a su marido a cargar unas maletas llenas de billetes de 500 euros porque el coche eléctrico del hombre se ha averiado a mitad del camino hacia la frontera. Con este punto de partida, Cunillé examina los daños colaterales de la corrupción a través de la devastación moral de una mujer que quiere recuperar el sentido de su vida y de su trabajo como profesora de geografía en un instituto.
“El próximo curso ya no estaré aquí. La geografía y la historia os la dará algún otro profesor, si es que estas materias son consideradas aún dignas de estudio en el nuevo plan de enseñanza del próximo curo. En el Ministerio del Desencanto y la Desolación quieren que todos bebamos del Leteo, el río del olvido, cuyas aguas no hacen ningún ruido, y llegan siempre plácidas y tranquilas hasta el mar más embravecido. El río de la memoria, en cambio, grita y gime… y sus aguas son rojas y bajan llenas de esputos y vómitos…” (Lluïsa Cunillé, Geografia)