Jeanine lucha por mantener una vida digna y ordenada en la ciudad, pero la realidad es que este hito tan sencillo es más difícil de conseguir a cada paso que da. Dirty Crusty explora los límites de las relaciones, los espacios y las identidades, y expone cómo este mundo demasiado salvaje nos empuja hasta límites insospechados.
Clare Barron escribió esta obra en el 2011, antes del Metoo, antes de ser consciente de que había sufrido una agresión sexual y antes de ser diagnosticada con un trastorno bipolar.Confiesa que la escritura de este texto fue clave para poder poner nombre a las dos realidades que le acompañaban y sobre las que hablaba sin identificar.
Con un lenguaje irreverente, la autora revelación de la escena underground neoyorquina nos acerca a la dificultad de sobrevivir a nuestros días y encontrar nuestro lugar en el mundo a través de una anticomedia romántica que navega entre el humor ácido, la incomodidad y el desorden.
Sinopsis
¿Cada cuándo lavas la ropa interior? Es duro, mantener una mínima higiene personal. Es difícil que nuestra casa no se convierta, llena de envolturas vacías de comida para llevar y ropa sucia, en el símbolo de nuestro caos mental. Pero si tú no te encargas de dormir las horas necesarias, nadie puede dormir por ti. Pone orden, Jeanine. Sé funcional. Embrace the change, no seas guarra. Relaja los músculos, Jeanine, libera los hombros, las rodillas, abre el pecho. Plié, relevé, plié, relevé, no de beurré. ¿Me follarás con esa máscara? ¿Crees que puedes enseñarme a bailar? ¿Podría ser una bailarina vieja? ¿No cree que huele un poco de olor a quemado?