Meritxell Huertas: "Nos hacen falta más referentes de géneros e historias distintas"

Mar Sifre Rigol

Meritxell Huertas (Sant Gervasi, Barcelona 1973), dejó su trabajo como dependienta en la tienda fotografía de sus padres para dedicarse al mundo de la interpretación. Lo hizo junto a su compañero de clase Josep Maria Lari Vilaplana (más conocido como Mag Lari), en un pequeño local del barrio que ahora se ha hecho suyo, el Poble Sec. Tras su paso por La Cubana y por éxitos teatrales como Lapònia, Confessions de dones de 30 o Los monólogos de la vagina, Huertas protagonizará con Maria Garrido Elles s’estimen, una pieza recopilación de los mejores momentos de los éxitos franceses Ils s’aiment, Ils se alimenta encore e Ils se ha asimés de Pierre Pamade y Muriel Robin. La obra se verá a partir del 10 de febrero en la Sala Aquarella en una nueva versión creada para conmemorar el 20 aniversario de la obra original y que protagonizan una pareja de mujeres: una lesbiana y una bisexual.

Hay quien diría que es forzado poner a dos mujeres interpretando los papeles que hasta hace poco ha interpretado una pareja heterosexual. ¿Por qué hacerlo?

Siempre está bien visibilizar, si no lo muestras, parece que no existe. Nos hacen falta más referentes de géneros e historias distintas. Elles s’estimen tampoco es una obra que vaya con una bandera LGTB, en realidad es una comedia sobre el mundo de las relaciones, sean del género que sea quien la forma. Son lugares comunes donde se encontrará todo el mundo que haya convivido en pareja.

En el cine y en la televisión podemos ver algún referente de mujeres lesbianas o bisexuales, pero en el teatro cuesta aún más. ¿Cuál crees que es el motivo?

Cierto, hay pocos referentes. Estamos empezando a mostrarnos tal y como somos, a que no nos dé tanto miedo. Al fin y al cabo lo que queremos es poder enseñar que la gente se ama y se gusta. En cuanto a los hombres homosexuales hubo el estallido de Smiley de Guillem Clua, y en cuanto a las chicas, pues abriremos puertas, caminos y lo que sea necesario.

¿Qué falta para que exista más representación?

Falta atreverse y querer dar el paso. Con esto la productora Anexa ha sido valiente y yo he subido al carro rápido. Pero ya te digo, no es una obra de lesbianas. No le queremos dar importancia a esto, es una pareja y esa es la gracia. La mostramos como una pareja más, como lo que es.

Meritxell Huertas en una escena de ‘Los monólgos de la vagina’, con Aina Quiñones y Alícia González Laá

¿Qué temas aborda la obra para que todo el mundo se sienta interpelado?

Sobre todo la convivencia y el desgaste de la pareja, pero también aborda las dudas, las discusiones, las relaciones con la familia, los celos o el reparto de los objetos cuando lo dejan, por ejemplo. Elles s’estimen interpela a lo miserables y la mezquindad que llevamos encima, pero lo hace en clave de humor. Son situaciones muy cotidianas con un punto que frota el clown. Es sobre todo una demostración de fuerza en clave cómica entre dos actrices: yo creo que, al final, la gente va a olvidar que son dos mujeres. De hecho, es lo que pretendemos.

Comentábamos la poca presencia de las mujeres lesbianas y bisexuales en el escenario, sin embargo están detrás?

Estamos y cada vez intentamos estar más delante. Seguramente vamos a paso de hormiga, pero poco a poco se llena el fregadero. Yo procuro hacer todo lo posible para que estemos en todas partes. Todos los géneros y todas las opciones.

«Quién sabe si con ‘Ellas se aman’ pueden descubrir un camino, yo estaría muy orgullosa y contenta»

¿Y son visibles?

Cada uno sabe el momento en que se encuentra en su vida y cómo se siente, pero cada vez hay más espacios de seguridad para que todo el mundo, que lo quiera y tenga la necesidad, se exprese tal y como es. Quien sabe si con Elles s’estimen pueden descubrir un camino, yo estaría muy orgullosa y contenta. Hay mucha gente que cuando ve un pequeño referente público hace un clic y eso es muy bonito. Al fin y al cabo, yo vivo en una burbuja donde todo el mundo está abierto y habla de su sexualidad tranquilamente, pero quizás no he visto el mundo real.

Las burbujas que creamos como espacios seguros también son el mundo real.

Sí, pero dentro de mi círculo la realidad de la obra existe, seguramente no es el caso de todos. Pienso que con Ellas aman se abre un abanico de posibilidades porque no es una pieza dirigida a un público cerrado y específico. Podrán venir mis colegas, pero también mi cuñado, mi hermana, sus compañeras de la oficina y mi madre con sus amigas.

La actriz protagoniza junto a María Garrido la comedia ‘Elles s’estimen’

Es una comedia romántica típica por todo tipo de públicos.

Con dos protagonistas mujeres. A mí se me hace mucho más atractiva, así que si me hubiera tocado con un compañero hombre. Tiene un plus, porque no le damos ninguna importancia, pero se lo enseñamos, el elefante está allí en medio.

¿La importancia está en no darle importancia?

Por mí sí. Quizás somos nosotros quienes pensamos que, el hecho de que sean lesbianas, no es nada destacable y nos sorprende después al público con una gran alegría. Al final, sólo que seas un poco portavoz ya es liberador para toda esa gente que se encuentra en el armario y necesita referentes. No sé qué va a pasar, pero será otra bomba que lanzaremos.

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