Lolita Flores: "La Colometa hay que interpretarla desde las entrañas"

Mercè Rubià

Quién lo iba a decir que Lola Flores serie la protagonista de uno de los grandes clásicos de la literatura catalana, la Colometa de La plaza del Diamante. De hecho, cuando el Teatro Español se lo propuso a Joan Ollé, ni se atrevía a pedírselo. Pero Serrat, amigo de Ollé y admirador de los Flores, tenía claro que el papel tenía que ser para ella y la convenció con una llamada de madrugada. De esto ya hace meses y ahora, tras el éxito en Madrid y una gira por varias ciudades, llega al Teatre Goya del 9 de abril al 3 de mayo.

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Lolita Flores no es, sin embargo, la primera Colometa que el director lleva arriba del escenario. Montserrat Carulla, Rosa Renom y Mercè Pons -en el mismo espectáculo-, y luego Ana Belén en Madrid y Jessica Lange en Nueva York, han interpretado la protagonista de la obra de Mercè Rodoreda en su adaptación en formato de monólogo. Pero el director, no se está decir que Flores es la mejor Colometa que ha visto. «No lo interpreta, sino que lo encarna; es una máquina expresiva, los mejores ojos que he visto en el teatro! »

La plaza del diamante es un relato fiel de los años de posguerra donde la protagonista, Natalia, una chica huérfana de madre que se siente perdida en el mundo, después de ver marchar y morir a sus queridos, pasará hambre y dificultades para sacar adelante el hijos. Una mujer que representa muchas otras a quien tocó vivir una época muy dura. «Si Rodoreda hubiera nacido en un país serio Colometa sería como Madame Bovary», reivindica Joan Ollé, que destaca la excepcional escritura de la autora.

Flores, que en un principio no veía claro que afrontar el reto porque «es una gran responsabilidad», explica que en la Colometa «o te la pasas por el hígado, o es imposible hacerla y ponerse en su piel». «He buscado su voz, su manera de moverse… Como no he estudiado, busco dentro de mí que puedo tener en común con este personaje». Acompañada de un único banco y la música de Pascal Comelade, Flores asegura que ha aprendido a encontrar otra manera de hablar, a no moverse, comunicarse sin gesticular. En este sentido, el director vuelve a encontrarle las virtudes: «Es una señora de verdad. La verdad preside su vida y la lleva al escenario en un camino impecable».

Aunque tras el éxito de este espectáculo le han llovido las ofertas, de momento la cantante y actriz sólo ha aceptado una, La asamblea de las mujeres que en agosto dirigirá Juan Echanove en el Teatro Romano de Mérida. Quiere seguir, dice, durante todo el tiempo que pueda con la Colometa, y llevarla de gira por todo el Estado.

Texto: Mercè Rubià

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Periodista. Teatrera. Enamorándome de la danza y del circo. Advertencia: Si la mayoría de mis recomendaciones tienen muchos aplausos no es por falta de criterio (que quizá también), si no porque prefiero hablar de las obras que me gustan. Muy lejos de querer hacer (o ser) crítica.

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