El dramaturgo y director Guillem Clua recupera en La Villarroel Smiley. Després de l’amor. La obra, estrenada en el 2020 en el Aquitània Teatre, vuelve a la cartelera con la continuación de la historia de amor entre Àlex y Bruno (Ramon Pujol y Albert Triola), los mismos protagonistas que se enamoraron hace 8 años con el éxito Smiley. Una història d’amor, en una nueva comedia más madura, actual y que nos habla de las relaciones gays pero también de la crisis de los cuarenta, el matrimonio, los fantasmas del pasado y las expectativas que nos crea el amor romántico.
«Al igual que Smiley. Una història d’amor normalizó el hecho de que una comedia romántica estuviera protagonizada por dos hombres jóvenes, esta nueva historia muestra una realidad diferente: la de la homosexualidad a la mediana edad, cuando las luces de la fiesta se apagan, cuando ya no tenemos ánimo para seguir bailando y preferimos quedarnos en casa, cuando nos toca entender que el amor puede ser algo más que pasión desatada y fuegos artificiales, cuando la soledad amenaza con dejar de ser algo transitorio…», comenta Guillem Clua.
La propuesta da continuidad al texto estrenado en 2012 pero está escrita para que se pueda ver sin haber visto la primera parte. En esta secuela, la pareja de personajes son más maduros y desvelarán qué ocurrió después del final de sus peripecias originales, abriendo la posibilidad de imaginar qué aventuras se esconden detrás del tan clásico fuera a negro del celuloide. Según el autor: «¿El montaje daba la oportunidad de responder a preguntas sobre la forma que había cogido la relación entre los personajes: ¿Seguían juntos? ¿Habían logrado superar sus diferencias para establecer una pareja duradera? ¿Eran una pareja abierta o cerrada? Felices o infelices?».
«Esta ha sido la obra más difícil que he escrito nunca», dice Clua, y añade: «He tardado años en dar con el texto definitivo ya que había que encontrar de nuevo el tono exacto, el equilibrio entre comedia y drama, la química entre los dos personajes… la magia, en definitiva, que hizo de la primera entrega algo tan especial”.
‘Smiley’, una historia que ha enamorado a medio mundo
En noviembre del 2012 Àlex y Bruno, los protagonistas de Smiley. Una història d’amor, se dio su primer beso en el pequeño escenario de la Sala Flyhard. Era un beso lleno de esperanza y de futuro, tal y como deben ser los besos de todas las comedias románticas, pero en ese momento nadie podía imaginar hasta qué punto lo acabaría siendo.
La obra enseguida enamoró a los espectadores barceloneses y saltó, primero, al Teatre Lliure y, después, al desaparecido Club Capitol donde realizó diferentes temporadas hasta marzo del 2015. En la gira catalana siguió la producción madrileña, que fue llenar los teatros Lara y Maravillas.
Al poco tiempo, el texto ya estaba traducido a varias lenguas y se han podido ver producciones en Alemania, Grecia, Chipre, Italia, Chile, Puerto Rico, Perú, Uruguay, Venezuela, Miami o Nueva York. En 2022 se estrenó una adaptación como serie a Netflix.
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