Jordi Bellés adapta y dirige una versión libre y actualizada del Cuento de Navidad de Dickens en un musical alocado.
Resumen del Cuento de Navidad de Dickens: Ebenezer Scrooge, el protagonista, es un viejo avaro que tiene esclavizado su trabajador, un joven pobre y de buen corazón. Después de que la noche de Navidad lo visiten tres fantasmas para mostrarle su pasado, el presente -a través de la casa de su trabajador-, y el futuro -donde ve su muerte, todo sol-, decide cambiar de carácter y ayudar a la familia del trabajador. Final feliz: recupera el espíritu de la Navidad.
Era en 1843 y Dickens hacía así una crítica del egoísmo, la avaricia y el capitalismo industrial del siglo XIX. Pero la sociedad ha cambiado, y también los espectadores. Jofre Ballés, autor de la dramaturgia, tiene claro que un público «cínico» como el actual, acostumbrado a la crueldad de los Simpsons o Padre de familia, ya no conecta con aquel espíritu navideño. Es por ello que ha trasladado la historia a Todos los Santos y la ha convertido en una historia «enérgica y enloquecida».
El banquero de Dickens se ha convertido en el Samuel (Miguel Ángel Sánchez), un joven empresario, ambicioso y déspota que encarna en su figura «el peor del capitalismo». A él, en lugar de aparecer darle los espíritus, le crean pesadillas. Y es allí donde las situaciones se vuelven locas y llenas de equívocos, con momentos que beben, incluso, de la commedia dell’arte. Lluna Pintado es Fobetor, la cabeza de los espíritus. A sus órdenes tiene «un par de chapuceros»: el espíritu vago (Jofre Ballés), cansado de hacer su trabajo, arquetipo del funcionario; y el novato (David Anguera), diagnosticado en vida de TDH y al que todavía se tienen que explicar muchas cosas.
Además, en su vida real, también está María, una vecina que se convierte no sólo el contrapunto del protagonista, sino también su posibilidad de redimirse. Anguera, por su parte, es también el ayudante del Samuel, un trabajador honesto, completamente contrapuesto al empresario.
La estructura del cuento, originalmente dividida en cinco partes, ha quedado desmenuzada. Aunque han mantenido el inicio y el final, han optado por no mantener el orden lineal del cuento: del fantasma del pasado, al del presente y después al del futuro. «Hemos querido darle dinamismo. Hoy en día nos distraemos mucho, somos mucho más tangenciales, y lo hemos exportado a la obra «, explica Ballés. Han creado un juego permanente de metateatralidad donde los actores interpretan varios personajes que, a su vez, representan nuevos dentro de los sueños, desde políticos corruptos banqueros.
El mundo de los sueños llega siempre de la mano de la música. Después de articular la dramaturgia, Ballés buscó canciones de musicales contemporáneos que encajaran con los momentos más cruciales de la obra. Muchas de estas piezas son de musicales recientes, la mayoría de esta década, que, en algunos casos, se sentirán por primera vez en Barcelona. Es el caso de ‘How Lucky You Are’, del musical Made in Dagenham, estrenado hace tan sólo tres meses, o ‘Brand New Day’, de Dr.Horrible s Sing-Along-Blog, el musical creado a raíz de la huelga de guionistas de Los Ángeles que sólo se puede ver a través de Youtube.
Texto: Mercè Rubià