Niño de Elche inaugura la temporada del Teatro Libre con Noli me tangere (no em toquis) una misa laica para reivindicar que el teatro es un acto cultural y artístico como lo son otros espacios de culto religioso. Una propuesta que combinará el flamenco heterodoxo del artista, un corazón, y con textos de dramaturgos como Marc Artigau, Clàudia Cedó, Albert Lladó y Victoria Szpunberg.
Sinopsis
Después de un tiempo marcado por la sensación de incertidumbre, de excepcionalidad y de disrupción; de suspensión de derechos, muerte y enfermedad, el Libre no quiere empezar la temporada como si no hubiera pasado nada. Conscientes de la vertiente de ritual colectivo y simbólico que tiene este oficio, la apertura de esta temporada se centra en llevar a escena una especie de misa laica.
Aprovechamos también la planta basilical de la Sala Fabià Puigserver y recuperamos el sentido laico y cívico de este tipo de construcción, que en la época romana era de reunión ciudadana. Haremos una liturgia para reivindicar el teatro como un acto cultural y especialmente rtístic tan importante como cualquier acto en otros espacios de culto religioso. El oficiante de este ritual será Niño de Elche, un cantaor que reivindica sus profundas raíces flamencas desde la más absoluta heterodoxia. Un artista subversivo, transgresor y disidente que siempre busca nuevos retos creativos para experimentar y hacer confluir lenguajes artísticos diferentes.