Josep Maria Ribaudí i Martí

…Que se encontraron para comer en el restaurante La Camarga y por eso la obra se llama Camargate, en referencia al Watergate. Si la intención del autor era hacer una crítica mordaz, creo que no lo ha conseguido; le ha salido más bien floja, con toques divertidos, pero cuidándose mucho de no traspasar ciertas líneas. Me ha dado la impresión de que todo el tiempo se la cogía con papel de fumar. Los personajes demasiado estereotipados (la Alicia de MILF y la Victoria de tía buena con el arroz pasado). No me ha convencido; la he encontrado oportunista. Leer más.

Sí, hay que verla por muchos motivos: porque es una joya, porque difícilmente volverá y porque os lo pasaréis en grande. La historia es buenísima, muy siciliana. La adaptadora, directora y actriz, Licia Maglietta es una fuerza de la naturaleza, una especie de Anna Lizaran, que ya es decir. Y poder verla en VOSC es un privilegio. En el teatro pasa como en el cine, las versiones originales… son las versiones originales. Que hace una «viuda blanca» en un lugar con costumbres tan convencionales como Sicilia? Pues aguantarse y buscarse la vida. Y la Liboria Serrafalco, nuestra heroina, se sale? Hostitu, se sale y con nota. Tenéis hasta el día 15 para poder verla (si conseguís entradas). Leer más.

Esta es una obra curiosa de Eduardo de Filippo, escrita para la radio, no para el teatro, pero que más tarde subió a los escenarios. Una obra breve en que la hermana de un ingeniero napolitano que viaja mucho, se queda a cargo de la cuñada que está enferma, muy enferma… En la versión original salen seis actores, pero ahora la tienen recortada a tres. Yo la vi en Milán, y como es una pieza corta, allí hicieron un prólogo con un monólogo, El dolore y de propina Pericolosamente, también un corto del mismo Filippo. Vale la pena ir.

Empezó como experimento de 20 minutos, pasó a 40 para represetnarla en Azoteas y ahora dura 80 en La Villarroel, además se han añadido dos ayudantes a la dramaturgia y del castellano ha pasado a bilingüe (cast-cat). No sé, no sé; me temo que tantos cambios no le han hecho ningún favor. La obra es divertida, la situación ingeniosa y los actores la defienden bien. Las discusiones de las dos hermanas con el cuñado de sparring divertidas, pero en general me ha parecido alargada. También entiendo que no se pueden abrir las puertas de un teatro como La Villarroel por tan solo 40 minutos. Leer más.

Y por eso es divertido este work and progress (según ellos) de un ensayo de pieza de cabaret inspirado en el estilo alemán de entreguerras. Como decía aquél, que no falte de nada, canciones, música, baile, striptease, participación del público, crítica a los poderes, fácticos o no. Parece que cada componente de la compañía va su bola, pero no. Helena Tornero ha escrito una historia sólida, aunque no lo parezca y Ester Nadal ha dirigido bien la peña, aunque pareció que había un gran desorden. Pienso que se trataba de esto y lo han conseguido. El público nos lo hemos pasado muy bién. Leer más.