La coreógrafa francesa Maud Le Pladec presenta en el Mercat de les Flors de Barcelona Silent Legacy, un singular dúo entre la niña Adeline Kerry Cruz y la bailarina Audrey Merilus que explora la sociología del género, el patrimonio y la cultura de la danza mediante el movimiento. El espectáculo, estrenado en la última edición del Festival de Aviñón, realizará sólo 2 únicas funciones en la ciudad: el 16 y el 17 de marzo.
Adeline Kerry Cruz durante la representación
Silent Legacy se compone de dos solos que se interconectan: un interpretado por Adeline, una niña de 8 años prodigio del Krump (estilo de danza surgido en los guetos de Los Ángeles para liberar la frustración y la rabia de una forma no violenta), y otro en el que participa Audrey, una bailarina de danza contemporánea. A través de sus movimientos, cada una de ellas evoca la herencia cultural y personal que las define. Adeline representa la fuerza, la rebeldía, la visceralidad, la vitalidad o la espontaneidad, mientras que Audrey es todo lo contrario, es fluidez, precisión, control, estructura, tradición o elegancia, como la danza clásica. Un contraste de visiones genera conexiones profundas entre las intérpretes. El espectáculo imagina la danza como herramienta para deconstruir normas y cuestiona temas como la amistad femenina, la sororidad, la identidad y el papel de la mujer.
Silent Legacy es la historia de estas dos trayectorias y las imaginaciones y conexiones invisibles que las unen; la revelación de identidades únicas. Una pieza que invita al público a reflexionar sobre la transmisión cultural o la importancia de la memoria en la construcción de la identidad, pero también sobre la herencia que recibimos de las generaciones anteriores y la responsabilidad que tenemos de transmitirla a las futuras.
Le Pladec, una coreógrafa olímpica
Maud Le Pladec se consolida con Silent Legacy como una de las coreógrafas más innovadoras de la actualidad. Formada en Montpellier, ha trabajado con grandes coreógrafos como Georges Appaix, Mathilde Monnier, Herman Diephuis, Mette Ingvartsen o Boris Charmatz, entre otros. A partir de 2010 ha creado numerosas piezas, por las que ha recibido diversas distinciones, ha colaborado en óperas y ha sido directora del Centro Coreográfico Nacional de Orleans. A finales de enero de 2024, Maud Le Pladec fue nombrada directora del Centro Coreográfico Nacional Ballet de Lorraine y será la responsable de la danza y la coreografía de las cuatro ceremonias de los Juegos Olímpicos de París 2024.
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