Tres veteranos amigos se reencuentran en un pueblo de la Catalunya rural para enfrentarse a un secreto olvidado durante décadas. Ésta es la premisa de Els ossos de l’irlandès, una comedia negra que mezcla tensiones, humor incómodo y una profunda reflexión sobre la fragilidad de las relaciones humanas. Se trata de un texto escrito por Víctor Borràs y dirigido por Xavier Ricart, reconocido con el premio Quim Masó 2022, que después de estrenarse en el Teatre Akadèmia vuelve hasta el 12 de febrero en el Teatre Poliorama.
Una comedia local
«Quise escribir un drama rural donde los protagonistas fueran gente del territorio», comenta Borràs. Los diálogos de la obra están impregnados de expresiones locales que aportan una autenticidad especial a la trama, hecho que destaca el actor Ivan Benet: «El texto es contemporáneo, pero la riqueza del lenguaje le da una dimensión única».
Pese a la profundidad del tema, Els ossos de l’irlandès es una comedia negra que explora las dinámicas entre los tres hombres. “Intentando encontrar la verdad de estos personajes, acaba surgiendo la comedia”, explica Ernest Villegas, que interpreta a Llorenç, un restaurador que vive con su madre y que sufre una ansiedad constante. Ivan Benet, que da vida a Xevi, añade que la pieza es un retrato “mordás” de una generación “nacida con la olla a presión de los años setenta”. Pepo Blasco, en el papel de Héctor, describe a su personaje como “uno de los causantes del conflicto, un hombre que todavía arrastra los errores del pasado”.
“Los defectos de los personajes son lo que hace que esta historia conecte con el público. Son hombres con sus miserias y contradicciones, atrapados en una situación límite que les obliga a mirarse en el espejo», explica Ricart.
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