Marta, Manelic, Sebastià… Lluís Homar se pone en la piel de todos los personajes de Terra Baixa bajo la dirección de Pau Miró.
Lluís Homar interpretó el clásico de Àngel Guimerà con sólo 17 años. Hacía de Manelic, el mismo personaje que en 1990 le llevó al escenario del Teatre Lliure en un montaje dirigido por Fabià Puigcerver. Con el primero, decidió ser actor, el segundo lo convirtió en el «Manelic de Catalunya». Ahora, vuelve a llevar a escena Terra Baixa, pero no para enfrentarse de nuevo al papel de pastor, sino para asumir, solo, el papel de Manelic, Sebastià, Marta e incluso el de la ingenua Nuri. Y es que, dice Homar, no quería ser un personaje, quería ser Terra Baixa, un mundo donde se enfrentan la «luz y la oscuridad, la pureza y la corrupción, el dueño y el pastor».
Pau Miró, director de la obra, en colaboración con el mismo Homar, ha adaptado la pieza respetando totalmente el argumento de la obra y sin tergiversar los personajes, pero centrándose en lo que consideran más esencial, el triángulo Sebastià-Manelic-Marta. La lectura que han hecho, sin embargo, es actual. Aseguran que no han cambiado el lenguaje, pero que «afrontar cada personaje entendiendo que no está hechos de una sola pieza, que participa de la complejidad y mostrar sus matices» es la manera de acercar esta historia a nuestros días. Por qué transformar este texto en una sola voz? Miró considera que precisamente «esta soledad arriba del escenario permite mostrar con mayor claridad la complejidad que hay en cada persona y focalizar la lucha interna que se produce en cada uno de nosotros».
Sílvia Pérez Cruz será el único acompañamiento de Homar, con una canción compuesta especialmente para este montaje. El espectáculo, que se estrena en Temporada Alta de Girona, hará temporada en el Teatre Borràs nada menos que dos meses, del 12 de noviembre al 11 de enero.
Texto: Mercè Rubià
Es una obra fantástica y Lluís Homar está increíble. No os la perdáis.