Carme Tierz: "Los jóvenes no quieren ser espectadores pasivos, quieren vivir experiencias y sentirse integrados en escena"

Rubén Garcia Espelta

RBLS Festival Teatre Jove celebra del 4 al 9 de noviembre su 3ª edición con la voluntad de seguir acercando las artes escénicas a jóvenes y adolescentes de 13 a 20 años. En esta nueva edición el festival amplía sus espacios, en el Teatro Tantarantana y al CC Cotxeres Borrell se suman el Teatro del CCCB y la Nau Ivanow.

RBLS (abreviatura del adjetivo: REBELS) es un festival de artes escénicas que quiere descubrirlos espacios, proponerles puestas en escena diferentes que conecten con sus intereses e inquietudes o involucrarlos en procesos de creación.

Carme Tierz es director artístico y una de las almas impulsoras de este festival que engaño, además, presenta la 1a Fira de Teatre per a Joves de Catalunya, para visibilizar proyectos escénicos para adolescentes y jóvenes.

Teatro Barcelona: Porque nació RBLS y en qué punto está el festival después de 3 temporadas?

Carme Tierz: Nació para cubrir un vacío. Desde hacía muchos años, sentíamos que no había público joven a los teatros. Cuando dejaban de ser niños y ya no asistían a las salas como público familiar, era muy difícil que volvieran al teatro, y luego recuperarlos era peor. Además, tenemos el convencimiento de que las artes escénicas son un elemento clave para el desarrollo intelectual, personal y social de los hombres y mujeres en esta etapa de la vida que es muy compleja. Era interesante llevar adelante un programa que favoreciera el contacto entre jóvenes y teatro y el formato de festival concentra actividades, espectáculos, talleres. Este carácter intenso y festivo conecta mucho con el público al que va dirigido, que año tras año se fideliza, y repite.

Porque la necesidad de crear una Feria de Teatro para Jóvenes?

Contactando con entidades y con teatros de todo el territorio, nos hemos dado cuenta de que no hay un circuito que normalice la presencia del teatro joven en las carteleras, ya que las personas encargadas de la programación no sabían muy bien qué propuestas programar pensando en adolescentes y jóvenes de entre 13 y 20 años. Paradójicamente es un público muy participativo si sabe que hay propuestas que hablan de ellos y que pueden vivir experiencias muy enriquecedoras, pero hay que ofrecerles propuestas que les llamen la atención.

Abundan las propuestas que les llamen la atención?

Hace tiempo que vemos como aparecen nuevas compañías con un estilo joven, contemporáneo y diferente, que utilizan un lenguaje de pie de calle, que rompe con lo que últimamente se estaba estilo.

Por ello consideramos oportuno abrir una ventana de oportunidades para todos ellos, y en compañía de la ACET (la Associació Catalana d’Escoles de Teatro) hemos organizado la primera Feria de Teatro para Jóvenes. La convocatoria ha sido un éxito: se han presentado 45 propuestas, de las que únicamente se han escogido 15. Tanto la respuesta de los artistas como la de los responsables de programación ha sido rápida y inmejorable, lo que nos indica que esta feria era muy necesaria.

¿Cuál es el apoyo que recibe el teatro para jóvenes en Cataluña?

Hasta hace pocos años el teatro dirigido a un público más joven no estaba muy dado. Es un público desconocido, más difícil de acceder, que no quiere decir inaccesible, pero hay que saber qué canales son oportunos para llegar de manera directa. Aparte de la extinta Moestra Butaka Jove de Olesa tampoco había precedentes para saber qué respuesta se obtendría por su parte. Ahora bien, desde hace cuatro años el interés está creciendo por parte de teatros, festivales, ateneos y centros cívicos. Se están interesante a acoger creaciones hechas por jóvenes, que probablemente también conectarán mucho con jóvenes. En Barcelona, ​​salas pequeñas como la Fénix, la Flyhard, el Àtrium, el Versus Glòries o el Escenari Brossa programan habitualmente producciones profesionales que también están enfocadas a un público que no está habituado a ir al teatro, y que además tiene unos prejuicios hacia las artes escénicas.

Una educación que incluya las artes escénicas aumentaría el interés?

En el ámbito cultural y educativo muchos profesionales trabajan el teatro con jóvenes en el ámbito escolar. Está demostrado que la práctica del teatro con jóvenes tiene muchos beneficios: mejora la expresión oral, el comportamiento social, el trabajo en equipo … A raíz de estos trabajos que se desarrollan en escuelas e institutos, mayoritariamente en franjas extraescolares, se genera interés sobre el teatro, y eso es muy positivo.


¿Cuál es el distintivo de un espectáculo para jóvenes, que lo diferencia de teatro familiar y teatro para adultos?

El distintivo respecto del teatro familiar es muy claro. Se abordan temáticas y formatos para un público que ya ha superado la barrera de la infancia, aunque no haya entrado plenamente en el mundo de los adultos. En cambio con la la frontera con el teatro adulto es difusa. El teatro joven es también teatro para adultos, pero tiene elementos que atraen mucho a los jóvenes y de entrada no lo saben, como el atrevimiento, la verdad, la voluntad de romper moldes, formatos diferentes y temáticas actuales. Los espectáculos más frescos y contemporáneos atrapan mucho al joven, pero también interesan a los adultos. Lo único que tenemos claro es que los jóvenes no quieren ser espectadores pasivos: quieren vivir experiencias y sentirse integrados en escena, estar cerca de los intérpretes … Por eso conectan tanto con los espectáculos de pequeño formato.

Qué falla para que se encuentren pocos jóvenes en las salas?

Necesitan más oferta y que puedan conocer lo que se hace en cada momento. Muchos me han comentado, en diferentes encuentros, que no les llegan estas informaciones. Hay que buscar a través de qué canales, qué fórmulas o través de qué redes sociales les hacemos llegar esta información. Necesitan vivir experiencias que los impacten por querer repetir.

¿Qué criterio ha utilizado para seleccionar los espectáculos programados en el festival y en la feria?

La singularidad y la calidad son fundamentales. También valoramos mucho que la propuesta pueda sorprender y atrapar a los jóvenes por el lenguaje que utilizan, por el formato, por el grado de innovación para la temática que desarrolla. Son espectáculos que ya se han entrenado porque todavía no tenemos la capacidad de producir espectáculos y por eso optamos por recuperar buenas propuestas que, a menudo, pasan desapercibidas. El resultado, de momento, ha sido positivo y es que los jóvenes espectadores salen muy satisfechos.

La Fira tiene unas bases ya establecidas, unos requisitos. Un jurado formado especialmente para la ocasión ha escogido los seleccionados. El jurado ha estado formado por una persona de la Nau Ivanow, como espacio comprometido con la creación contemporánea joven; un representante de la ACET; un representante de la ADETCA (Asociació d’ Empreses Teatrals de Catalunya); un miembro de Butaka Teatre Jove; y un representante del mismo festival RBLS, representado en este caso por todo el equipo joven del festival porque pensamos que no hay nadie mejor que los propios jóvenes para decidir que interesa a los mismos jóvenes.

Consulta la programación del RBLS Festival Teatre Jove haciendo clic AQUÍ.

Escrito por
Rubén Garcia Espelta TWITTER

Periodista y gestor cultural. Responsable de contenidos editoriales de TeatreBarcelona.com. Ha trabajo en medios como Catalunya Ràdio, El Periódico de Catalunya, La Xarxa, Ràdio 4 o Rac1.

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