Frustración, exigencia, devaluación personal, sumisión, incertidumbre… sentimientos dolorosos que se apoderan de la persona y la hacen vulnerable y maleable en manos foráneas. ¿Qué necesidad hay de llevar al extremo la mente y el cuerpo de alguien para conseguir rédito? ¿Por qué esta cultura de la explotación emocional?
En esta obra, Mel es una actriz que ha jugado la carta de la tristeza personal para que el director de un nuevo monólogo vea que puede entender la miseria y la pena que siente el joven Werther de Goethe y le dé el papel que le puede cambiar la vida. Consigue el trabajo y se siente exultante, pisará otra vez un teatro de Barcelona y, así, volverá a la rueda de la interpretación. Pero, evidentemente, no todo es tan sencillo. El trabajo con el director es cada vez menos comprensible y más extenuante.
Ácido, divertido e inteligente, el texto y la dirección de Miquel Mas Fiol desprende vitalidad por todos lados. Directo y sin pararse a observaciones banales, desgrana esta nueva tendencia de disfrutar y aprovecharse del dolor de los otros y, sobre todo, de explotarlo económicamente. Con el personaje de Mel habla de tú a tú con la espectadora y le narra todo lo que hay detrás de esta absurdidad. Hay un clamo absoluto a despertar consciencias y abrir los ojos al público, y lo hace con un ingenio brillante tanto con las palabras como con la puesta en escena.
Hay veces que el texto es muy potente, pero sin alguien igualmente especial no llega a su máximo exponente. Mel Salvatierra es una fuerza de la naturaleza que interpela, provoca y deja sin aliento al público. Coje a la espectadora el primer segundo de la obra y no la deja respirar hasta el final. Es un torrente emocional que arrasa y se deja la piel en cada escena. Una auténtica maravilla.
La música, la puesta en escena con audiovisuales que juegan un papel interesante y el terremoto provocado por Salvatierra conforman un montaje muy potente e imprescindible en la escena teatral de la cartelera. Una obra que divierte, sorprende y hace reflexionar, todo en uno.