Después de refrescar un poco el panorama teatral con Paradise la pasada temporada, la compañía Nico&Sunset vuelve con una nueva propuesta, otra vez, divertida, fresca y juvenil. Be my baby es una comedia aparentemente sencilla que juega con la cotidianidad y con personajes carismáticos y reconocibles para explicarnos una historia sobre la amistad, el amor y el difícil paso de la infancia a una primera madurez. Escrita y dirigida por Oriol Vila, se trata, claramente, de un paso adelante en la trayectoria de este equipo que supera la estructura episódica de Paradise para ofrecernos un arco narrativo más elaborado, con matices dramáticos interesantes y un personaje de género fluido muy valioso, especialmente, tratándose de un espectáculo dirigido a un público joven. La química del trío protagonista (Bàrbara Mestanza, Mireia Oriol y Nil Cardoner) resulta esencial para hacer funcionar la pieza, junto a la naturalidad de sus interpretaciones y su vis cómica, en especial, del personaje de Pepe. Su sentido del humor, quizás, no es válido por cualquier tipo de público, sin embargo, la obra es muy audaz a la hora de conducir al espectador desde una trama que parece anecdótica hacia un desarrollo más profundo y lleno de aristas. En definitiva, el montaje sabe captar el espíritu de los tiempos modernos donde las series de plataformas como Netflix o HBO nos han enseñado que los límites entre comedia y drama, trascendencia y ligereza ya no hace falta que sean tan excluyentes como antes.
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