Las relaciones de pareja -o incluso familiares o de amistad- en un entorno urbano se han convertido casi en un tipo de subgénero dentro del teatro musical. Obras como T’estimo, ets perfecte…, Dies normals o Guapos & pobres, por poner otro ejemplo autóctono, cumplen con una serie de premisas imprescindibles: personajes cercanos y reconocibles, situaciones cotidianas, un contexto sobradamente conocido por el público (el entorno laboral, la crisis o el 15M) y unas canciones que hablen de cosas aparentemente banales o poco glamourosas, como por ejemplo las paradas del metro de la Línea Verde. Los espectadores conocen ya muy bien este tipo de musical y no creo que nadie espere otra cosa. 73 raons per deixar-te promete todo esto que he enumerado y lo cierto es que lo cumple con creces, aparte de brindarnos una historia romántica que, por supuesto, es el centro y el motor de toda la trama.
Guillem Clua ha escrito un texto que funciona y Jordi Cornudella ha compuesto unas canciones que quizás recuerdan demasiado a otros musicales, pero que gustan por su emotividad y están muy bien defendidas por los cuatro intérpretes. En este sentido, Mercè Martínez, Mone Teruel, Abel Folk y Marc Pujol conocen muy bien el producto en el que están y no dudan al poner toda la complicidad posible. En definitiva, un espectáculo que juega bien sus cartas, a pesar de alguna situación excesivamente alargada o un tímido cambio de tono en la parte final.