Dicen que Mario Banushi, este joven con raíces albanesas es la cara más nueva del teatro griego. Ha dedicado buena parte de sus propuestas a estudiar sus propios vínculos familiares y ahora en Mami nos regala un poema visual sobre la relación entre madre e hijo.
Sinopsis
La propia biografía es el punto de inspiración para Banushi en esta pieza que se acaba de ver hace pocos días en el Festival de Aviñón. Está dedicada a las madres, así, en plural, ya que el mismo artista nació en Albania y quedó en manos de su abuela cuando su madre se fue, a pie, a buscar trabajo en la vecina Grecia. Con 6 años también fue a vivir allí, donde se formó y trabaja actualmente, sin olvidar ni las raíces ni a esta abuela a quien llamaba madre ni a la joven madre biológica a quien veía con cierta frecuencia. En esta relación, y en el universo personal del creador, el amor es alimento, nutrición.
Mario Banushi
Mami es una nueva muestra del talento y del teatro altamente visual que hace Mario Banushi, un creador de 26 años que es considerado una de las figuras más renovadoras de la escena griega actual. En 2020, cuando se graduó en la escuela de arte dramático, hizo un primer corto, Pranvera. Su debut teatral, sin embargo, fue durante la pandemia, con un montaje titulado Ragada, que se representó en un domicilio real. Poco después, en 2023, presentó Goodbye, Lindita, una pieza sin palabras que presentaba el duelo de una familia ante la muerte de uno de sus miembros y que fue un gran éxito entre un público fascinado por el personal lenguaje escénico de Banushi. La tercera y última creación escénica hasta el momento había sido Taverna Miresia – Mario Bella Anastasia, homenaje a la taberna familiar que regía su padre en Albania.