Potser somiar es una fábula, con tono de comedia, sobre la pérdida de los seres queridos, la añoranza, el paso del tiempo y sobre como el amor perdura siempre más allá de la ausencia.
Con esta obra, el autor Antonio Tabares hace fluir una pequeña historia llena de ternura sobre la paradoja de la existencia, el miedo de la pérdida y la angustia de la ausencia. Dicen que la magia y los sueños andan cogidos de la mano. Que sin sueños no hay magia y que sin magia los sueños no se acontecerían. Aun con todos los conocimientos científicos que el ser humano posee hoy en día, nuestra mente todavía está llena de incontables misterios que solo se explican a través de lo inexplicable. A la postre, esta idea romántica que los sueños también son sueños (“los sueños, sueños son”) nos atrae, nos conforma una idea paranormal de la realidad para intentar de dar una explicación a aquello desconocido.
Tabares, que tiene el Premio Tirso de Molina 2011, el Premio Réplica 2012 y dos nominaciones a los Premios Max como Mejor Autoría Teatral, reconoce que en su texto existen referencias personales que fue recopilando para tejer una fábula a partir de Imma, una mujer de treinta y cinco años que pierde la vida en un quirófano mientras lo operan de una intervención complicada. Una fábula donde la muerte no es un final, sino un principio. Y donde los sueños toman todo el protagonismo.
Sinopsis
Potser somiar es una comedia tierna y muy humana que habla de la relación íntima y especial que todos juntos mantenemos con nuestros muertos y como estos continúan influyendo, aunque de manera intangible, en nuestras vidas. Con toques de comedia y de poesía, la obra sigue el viaje de Imma, una chica de treinta y cinco años, que después de morir en una operación a coro abierto, se aparece a los sueños de aquellas personas que la necesitan. Porque al fin y al cabo, como sabe muy bien todo el mundo, los muertos son muertos pero no del todo.
