El Teatre Nacional de Catalunya ha presentado dos de los espectáculos que, junto con Alba (obra de la que os hablamos en este artículo), se podrán ver en sus escenarios durante las fechas navideñas. Se trata de Troia, una veritable odissea! y La niña gorda.
Troia, una veritable odissea! es una propuesta de Cor de Teatre con dirección de David Costa y Joan Maria Segura i Bernadas que se podrá ver en la Sala Gran. Se trata de un espectáculo inspirado en La Ilíada y La Odisea en el que treinta intérpretes nos harán viajar con sus voces por algunos de los episodios más representativos y emocionantes de estos dos poemas épicos fundacionales de la cultura europea. Viviremos en directo la famosa Guerra de Troya y las aventuras de Ulises de regreso a Itaca.
Esta odisea musical es a la vez un recorrido a cappella a través de grandes coros de la historia de la música, con piezas de Purcell, Bach, Händel, Mozart, Verdi o Wagner. La pieza promete mostrarnos La Ilíada y La Odisea como nunca nos las han explicado antes. Es un espectáculo sin texto y para todos los públicos y también una fusión escénica y musical potente, expresiva y muy plástica desde la mirada de Cor de Teatre.
Por su parte, La niña gorda es un espectáculo basado en una de las mejores novelas de la literatura catalana que, por primera vez, se adaptada al teatro. Un texto de Santiago Rusiñol dirigido por Xavier Albertí adaptado y protagonizado por Jordi Oriol que se representará en la Sala Tallers.
Celebrada novela de la primera mitad del siglo XX, La niña gorda hace una ácida parodia de La ben plantada de Eugeni d’Ors. Con esta obra, Rusiñol se enfrenta crudamente al idealismo novecentista, que pretendía poner las bases de un nuevo Estado sin tener en cuenta las miserias con que malvivía una gran parte de la sociedad catalana.
La propuesta explica la historia de la hija de un librepensador alcohólico y con una educación sentimental a base de exaltados folletines sentimentales. La llamada niña gorda es una cándida criatura que acabará siendo exhibida como una atracción de circo por la magnitud de sus carnes, rodeada por un mundo sórdido que alimenta continuamente su ingenuidad para obtener un rendimiento económico.