Kràmpack, el debut como dramaturgo de Jordi Sánchez, vuelve a la cartelera barcelonesa después de más de 20 años sin estar presente. El lugar escogido es el Teatre Aquitania, dirigida por Pep Antón Gómez y protagonizada por Jaume Casals, Lidia Casanova, Àlex Ferré y Mikel Iglesias.
El texto de Jordi Sánchez narra la historia de cuatro amigos que se van a vivir juntos, y entre los cuales hay, además de amistad, una fuerte tensión sexual. Una comedia al puro estilo sit-com de los años 90 (Friends, Frasier o la propia Plats Bruts), con un tono irreverente que se ha mantenido fresco después de 25 años de su creación.
«Los intereses de alguien de veintipocos de entonces son los mismos que los de hoy, en general: las ganas de gustar, de triunfar, de follar. Las obsesiones, los miedos… la necesidad vital de encontrar una forma de desangustiarse», dice Jordi Sánchez. «Tengo ganas de ver una versión de Kràmpack que me satisfaga, hecho por buenos actores, y dirigida por mi compañero de viaje profesional, Pep Antón Gómez, en quien confío absolutamente».
El espectáculo original, protagonizado en su momento por Joel Joan, el propio Jordi Sánchez, Mònica Glaenzel (y después Ester Formosa) y Eduard Fernández, logró la cifra de 50.000 espectadores a lo largo de 4 temporadas en La Villarroel, e hizo temporada en Madrid en dos ocasiones (1996, 2002), así como en Caracas. Incluso, en el 2000 se estrenó una película dirigida por Cesc Gay inspirada en el texto teatral. Ganó el premio de la Crítica de 1994, y el premio Max en 2003. Fue, además, el pistoletazo de salida de una carrera de éxito para Sánchez, con otros textos como Sóc lletja, Excuses!, Avui no sopem o El eunuco, además de series de televisión de gran éxito como Plats Bruts o L’un per l’altre.