La companyia La Peleona estrena esta semana sus dos primeras obras, L’efecte perfecte i Sota Zero, una en la Sala Beckett y la otra en la Sala Atrium. Dos piezas oscuras e inquietantes escritas por Carla Torres.
La Peleona nace después de un encuentro en el Atrium Lab de Patricia Mendoza y Carla Torres, dos actrices «con un punto gamberro» con ganas de investigar la comedia desde la realidad, con contenido y procurando que no se quede en la superficie. Aliadas después con Quique Nubiola buscan el «efecto cubata»: que empieces con unas risas, pero acabes bien removido. «Nos gusta remover conciencias desde una vertiente lúdica. Es interesante que haya un componente de reflexión sin aleccionar. El punto paternalista no me interesa, pero si puedo joderte un puñetazo, te pegaré «deja claro la» peleona» Torres. «La otra parte de nuestro sello es la verdad actoral, la familiaridad del actor en escena. Enseñamos el culo y vamos a muerte con lo que tenemos. No hacemos una tragedia, hacemos un espectáculo desenfadado, pero nos comprometemos al mismo nivel». Sin buscarlo, comienzan fuertes. El estreno de las dos primeras obras de la compañía, Sota Zero y L’efecte perfecte, son la misma semana, una en la Sala Atrium y la otra en la Sala Beckett.
SOTA ZERO, COMEDIA NEGRA CON TOQUES DE THRILLER
Ponte en el lugar de Sònia (Carla Torres). Estás en una cena con tu pareja, Miki (Carles Goñi), un calzonazos friki-científico de quien no deberías fijado nunca si no fuera porque el fanfarrón de tu ex, Johnny (Joel Minguet), te rompió el corazón hace 15 años y desapareció. Ahora ha vuelto y también es la cena. Estás inaugurando el nuevo piso y has invitado también tu hermana, la Cuca (Anna Bellmunt), tu hermano Carlitos y su ex-mujer, la Marifeli (Patrícia Mendoza), embarazada de 9 meses y con una ilusión: recuperarlo. Podría ser -sólo- una comedia de enredos, pero no lo es. Carla Torres ha escrito una comedia con grandes elementos de thriller y, por tanto, esto no queda ahí. Un rato antes de empezar la cena, aunque fuera de casa, has tenido una discusión con tu hermano y, por accidente, se ha muerto. Vamos, rápido, ¿qué haces? Llamas a la policía o tiras adelante la cena? Coi, con lo que te ha costado organizarlo! Lo has acertado. No, no llamas el 012, la nevera ya es bastante buen lugar para esconder el cuerpo … por ahora! (Sí, también tienes razón, no podrás aguantar mucho el secreto …).
El texto, que Carla Torres guardaba en el cajón desde hace años, es una comedia negra «esperpéntica» y con toques de thriller «llevada al límite», según el codirector del espectáculo, Carles Mallol, un dramaturgo y director que ha demostrado con creces su predilección por obras oscuras e inquietantes y que disfruta, dice, «cuando hay violencia y matan niños». La cena familiar acabará convertido en una cena de monstruos y «todos los personajes de la obra acabarán subiendo al carro de la violencia», explica Mallol. «El cuerpo y el congelador donde está guardado, serán un personaje más» en esta obra que define como «un juego que parte de la verdad, pero que a la vez te enseña en todo momento que es un juego, te enseña el teatro» . Una verdad desde una propuesta escénica «que en principio no lo es» ya que para empezar, la cena, no hay ni mesa. Un paso adelante de la Sala Atrium, donde hasta ahora la comedia ha tenido escasa presencia y donde la mayoría de textos eran de autores reconocidos.
LOS ADULTOS DESAPARECEN EN LA BECKETT
¿Qué pasaría si una mañana nos diéramos cuenta que los adultos han desaparecido? Este es el punto de partida de L’efecte perfecte, a partir del cual un grupo de hombres y mujeres se encuentra para intentar averiguar qué ha pasado. Entonces comienza el juego, un juego donde también entrará un desconocido que afirma que tiene los adultos y que desafiará a los jóvenes protagonistas de una obra a medio camino entre el suspense y la ciencia ficción que, según su autora, «pretende remover la conciencia del espectador planteándole algunas cuestiones morales sobre la educación, la ambición y la exigencia».
El espectáculo forma parte del ciclo de teatro joven de la Sala Beckett, donde también se han programado Collectivus de Marta Aguilar interpretada por la compañía Els Malnascuts, y La roulotte (Der Wohnwagen) de Rémi Pradère y Max Grosse Majench, una propuesta del P14 de la Volksbühne de Berlín, que lleva años ofreciendo a jóvenes a partir de 14 años la posibilidad de dedicarse al teatro.
Texto y fotografías: Mercè Rubià
