Ante la crisis generada por el COVID-19, el Ayuntamiento de Barcelona ha activado un paquete de medidas dirigidas al sector cultural para empezar a hacer frente a una situación que afectará gravemente al tejido cultural de la ciudad. Una de las propuestas anunciadas es la prolongación del Festival Grec en agosto para reprogramar espectáculos suspendidos estos días.
La organización del festival ya está trabajando para reformular la programación y el calendario de la edición 2020, adaptándose a las circunstancias e intentando dar el máximo apoyo a las compañías afectadas por la alerta sanitaria. Además, intentará acoger un buen número de producciones de compañías locales programadas en la Quinzena Metropolitana que también se ha tenido que aplazar.
Otras medidas del Ayuntamiento
En total, el Gobierno municipal ha anunciado que impulsará 10 medidas extraordinarias y ha instado al Gobierno del Estado y a la Generalitat a implementar diferentes propuestas, como la reducción al 0% del IVA cultural hasta finales de año. De estas medidas, las que implican directamente una inversión del Consistorio son:
- La convocatoria de una subvención extraordinaria de 1 millón de euros dirigida a paliar los efectos de la crisis poniendo especial atención en aquellas estructuras más débiles vinculadas a la cultura de base.
- Una partida de inversión extraordinaria de 1 millón de euros para las bibliotecas, canalizada mediante librerías de Barcelona y distribuidoras, para incrementar los fondos de las bibliotecas de la ciudad.
Además, en cuanto a tasas y tributos, el Ayuntamiento reforzará de los fondos destinados a la convocatoria por subvención del IBI del ICUB para entidades culturales abiertas al público, como por ejemplo salas de teatro, cines, espacios de creación, comercio cultural y librerías, y creará subvenciones para financiar el 100% de las tasas para rodajes audiovisuales en la ciudad hasta el 31 de diciembre de 2020.
Otra medida es el adelanto de cachés de programaciones pospuestas. El Ayuntamiento avanzará a compañías y artistas parte de los cachés de los espectáculos y actividades programados y pospuestos por efecto de la crisis, como en el caso de la Quinzena y Districte Cultural.
El aplazamiento de San Jordi
Uno de los aplazamientos más sonados, sin embargo, es el de San Jordi. Continuando con el paquete de medidas, el Ayuntamiento facilitará a la Cambra del Llibre todos los permisos necesarios y la pacificación de calles y avenidas de la ciudad en la fecha en que finalmente se celebre Sant Jordi de este año. El festival literario Món Llibre, que organiza el Ayuntamiento y tiene lugar en el CCCB y en el MACBA, se reprograma y se hará los próximos 20 y 21 de junio. Como última medida, el Consistorio barcelonés se compromete a priorizar las vías ordinarias de apoyo al tejido cultural, tales como subvenciones, programaciones y comunicaciones públicas, así como a aplicar las disposiciones generales referentes a mantenimiento de contratos y ocupación derivada, extensión y modificación de plazos cuando sea necesario.
Las peticiones del Ayuntamiento de Barcelona al Estado y a la Generalitat
El Ayuntamiento de Barcelona hace también un llamamiento a las administraciones competentes en materia cultural, el Estado y la Generalitat, a emprender medidas fiscales y económicas que reviertan positiva y transversalmente a todo el sector. Al Estado español, el Consistorio le pide que destine este año los 25 millones de euros previstos en el acuerdo entre gobiernos y canalizado mediante el convenio de coliderazgo (bicapitalidad) que hay que formalizar, prioritariamente con dos grandes objetivos: hacer frente al déficit coyuntural que se produzca en las equipaciones de capitalidad entre el 15 de marzo y el final del periodo que alcance el estado de alarma, y hacer una aportación extraordinaria dentro del conjunto de medidas para apoyar al tejido cultural de la ciudad.
Además, el Gobierno municipal también pide que se reduzca el IVA cultural al tipo mínimo establecido del 0%, asimilándolo al del ámbito educativo, como mínimo hasta diciembre del 2020. Por último, se pide al Gobierno español que establezca “nuevos criterios para adecuar en el nuevo contexto la definición de causa “de fuerza mayor” para facilitar -en caso de que sea necesario- la reprogramación de acontecimientos culturales sin perjuicio del conjunto de las partes, contemplando las diversas casuísticas del sector cultural y el impacto de la crisis en su viabilidad económica”.
Sobre las peticiones a la Generalitat, el Ayuntamiento de la capital catalana insta al Gobierno a crear un espacio de coordinación entre instituciones mientras dure la crisis, para canalizar conjuntamente las medidas en el ámbito de la cultura que impliquen a ambas instituciones. Finalmente, el consistorio también hace pública la petición de cerrar un acuerdo con el Instituto Catalán de Finanzas para abrir una línea de microcréditos de hasta 20.000 euros, a interés muy bajo o cero, para poder atender demandas y necesidades de pequeñas y medianas empresas culturales, y facilitar los trámites necesarios.