La danza y la fusión entre disciplinas como el teatro, la danza y el circo cogen impulso la segunda y tercera semana del Festival Grec y ocupan buena parte de la programación con espectáculos como En avant, marche!, Incisions, Hakanaï o Fuga.
En avant, marche! significa la vuelta al Grec de Alain Platel y la compañía que dirige, Les ballets C de la B, que la edición pasada maravilló público y crítica con Tauberbach. Ahora lleva el Teatre Lliure una vivencia sobre las bandas musicales de origen popular que -según el director del Festival, Ramon Simó- consigue crear «una delicia de espectáculo» que entra en todos los territorios: danza, música y teatro. Además, Platel ha aliado con la Banda Municipal de Barcelona que, con la incorporación de un grupo de jóvenes músicos, vive un momento dulce y de reinvención y está participando en propuestas bien diferentes como ésta o el concierto con el grupo Oques Grasses.
Incisions es un tríptico del coreógrafo Tomeo Vergés. Un catalán con compañía en Francia que ha partido de una historia familiar para hacer, «como todas las autobiografías», una «autoficción». Comienza, como muchas otras historias, con la boda de la abuela con un segundo marido, después de que su no vuelva de la guerra, pero que continúa de manera bien diferente cuando, al volver el primer marido, deciden vivir los tres juntos. Inspirándose en el cine, Vergés consigue que una misma escena, cambiando las velocidades, pase del burlesque en el cine fantástico.
Hakanaï significa provisionalidad, efímero, en japonés. Aquí es un espectáculo, un pequeño poema visual con una particular puesta en escena donde todo es en directo: la danza -claro-, pero también la música y los efectos visuales. Como si fuera un concierto, el artista visual interactúa con el bailarín y el músico. La misma Compagnie Adrien M / Claire B presenta Cinématique, donde ya no sólo juegan con la imagen, sino que ya hay una importante presencia narrativa en medio de una escenografía creada por la luz origina un paisaje onírico en transformación constante.
Fuga es circo, teatro y danza. Un espectáculo que se sirve de las tres disciplinas para preguntarse sobre las limitaciones que tenemos o nos imponen, y la lucha por liberarse de él. Es, según dice Ramon Simó, «la voluntad de ir hasta el límite de uno mismo para ver dónde está la libertad». Una pieza llena de planos verticales y horizontales, ritmos minimalistas e imágenes poéticas.
