El dúo Galván-Khan y Sol Picó abren el Mercat

Mercè Rubià

Torobaka, un encuentro excepcional entre Israel Galván y Akram Khan, y OneHit Wonders, la revisión de veinte años de la compañía Sol Picó, abren una temporada centrada en el amor en el Mercat de les Flors.

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La primera vez que Israel Galván pisó el escenario del Mercat lo hizo ante unas escasas 30 personas, Akram Khan apenas llegó a la mitad del aforo. De eso no hace ni diez años. Ahora, son dos de los coreógrafos de mayor reputación, con una trayectoria imparable y reconocimiento internacional que colapsan la web del Mercat y agotan entradas en sólo tres horas, «como en un concierto de Bruce Springsteen«, bromea su director, Francesc Casadesús. Él es el culpable de este encuentrodiálogo entre el flamenco del bailaor sevillano y el kathak (tradicional de la India) del bailarín inglés de origen hindú. «Es un placer juntar dos amigos que no se conocen«, asegura.

«Al principio era muy escéptico con la propuesta de Cesc, pero después vi bailar el Israel y me di cuenta que si tenía que hacer algo de flamenco, tenía que ser con él». Khan sólo tiene elogios por su compañero de escenario, de quien asegura que escarba como nadie el pasado y la tradición para construir el futuro, un hecho poco habitual en la danza contemporánea. «Nunca había bailado con alguien que bailara tan bien«, Galván tampoco se queda corto y asegura que a partir de ahora siempre llevará un un trozo de Akram en su cuerpo. Una complicidad y una afinidad que, al inicio, sólo eran que malentendidos. «Como ninguno de los dos conoce el lenguaje verbal del otro, fue como ‘lost in translation‘, pero precisamente eso es lo que ha acabado haciendo el espectáculo como es, con» cosas nuevas, insólitas «, dice convencido Khan.

Sobre el escenario les acompañarán dos músicos y dos bailarines, en una fusión con música italiana, corsa, flamenca, india o sarda. Un terreno neutral donde ambos han dejado sus armas, Galván las botas de flamenco y Khan los conocimientos del kathak. El resultado, una nueva forma de moverse, que no es ni flamenco ni danza contemporánea, con momentos de solo, dúo, o incluso con sólo los músicos en el escenario.

Es la primera de las muchas encuentros entre artistas que propone esta temporada el Mercat (Rocío Molina y Honjo Wang, Shantala y Ferran Savall ) y antes de estrenarse ya ha dado sus frutos. Ante la prensa Khan ha propuesto un segundo encuentro con Galván, pero con un director externo, para encontrar otra mirada. Un abrazo sella la propuesta. Parece que esta temporada, que tiene como leivmotiv el amor ya ha calado entre los artistas.

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Otro de los ejes de la temporada es la recuperación o revisión de espectáculos imprescindibles de la historia de la danza contemporánea, además de la apuesta por los talentos de casa.

VIAJE POR LOS 20 AÑOS DE COMPAÑÍA

Sol Picó sube a un avión que la llevará de viaje por los 20 años de compañía y a reflexionar qué han significado con un solo íntimo, frágil y con «la emoción al servicio del espectáculo«. El piloto es su alter ego con la voz del co-director del espectáculo, Ernesto Collado, quien ha ayudado la coreógrafa a trabajar el texto de la pieza a partir de improvisaciones. «Deja de bailar y ponte a dar clases como todas tus compañeras!», la voz no será precisamente dulce, sino que le enfrentará a sus miedos.

El formato parece a Bésame el cactus, un solo pero acompañada de Joan Manrique, que hace de maquinista, actor, regidor y hasta de faquir, explica la bailarina de Alcoi. «Si hace 20 años era una joven que se enfrentaba al miedo del desamor, al miedo de irse, ahora me vuelvo a enfrentar pero desde otro lugar, desde la rebelión. Cuando hice Bésame el cactus los límites estaban en el infinito, ahora ya los empiezo a ver, se acercan «. Sol Picó tiene 47 años, pero asegura que seguirá subiendo al escenario mientras pueda mantener el listón. Y es que no se ha de imaginar un proceso dramático, sino una mirada al paso del tiempo irónica y sarcástica. Y es que «es importante reír de la vida y de uno mismo», asegura.

OneHit Wonders es una oportunidad fantástica para ver reconstruidas las piezas más emblemáticas y representativas de su carrera. Francesc Casadesús ha animado a la gente joven que no conozca la Sol a acercarse al Mercat, porque asegura que no sólo «es una bestia escénica«, sino que además, «la dramaturgia es brillante y se lo pasarán bomba «.

Texto: Mercè Rubià

Escrito por

Periodista. Teatrera. Enamorándome de la danza y del circo. Advertencia: Si la mayoría de mis recomendaciones tienen muchos aplausos no es por falta de criterio (que quizá también), si no porque prefiero hablar de las obras que me gustan. Muy lejos de querer hacer (o ser) crítica.

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