La humanidad intenta sobrevivir y adaptarse a su entorno y al día a día que se le abra delante. Ya sea para conseguir un sueño, para hacer feliz a aquellas personas de su alrededor o, simplemente, para tirar hacia delante un poco más e intentar conseguir la apreciada vida que se supone que tiene que tener. Y es en este camino que a veces surgen las oportunidades reales.
Ada es una actriz en el paro que intenta conseguir trabajo para poder pagar el alquiler mientras intenta no perder sus valores e ideales. Xavier es un empresario que tienen problemas para relacionar relajadamente con la gente. Ella decide dar clases particulares para ayudar a aumentar las habilidades comunicativas e interpretativas de cualquier persona y, con su octavilla en la mano, él decide apuntarse para aprender a ser graciosos. Las risas están servidas y aliñadas con grandes canciones.
¿Y si mañana es peor/mejor? Con este mantra y su melodía en la cabeza sale el público de esta producción, una comedia romántica musical muy divertida, fresca y con una música que mueve por dentro y por fuera, que da ganas de cantar, bailar y ser feliz.
El texto es desenfadado y parece muy sencillo, pero la realidad es que encaja temas fundamentales en la vida de cualquier persona: encontrar su sitio y sentirse valorada. Mara Jiménez Y Xavi Navarro interpretan a una pareja con mucha sintonía que, aunque están en las antípodas el uno de la otra, acaban conectando y viendo quién es realmente el otro, entendiendo cuál es su esencia. La química entre Ada y Xavier nace del gran trabajo de Jiménez y Navarro, que se dejan llevar por sus personajes quedando fuera del escenario cualquier prejuicio o estereotipo para dar vida a dos personas complejas y reales.
La escenografía es fresca y da color –literalmente- a una historia muy cercana con un ritmo trepidante. Es la música la que crea el ambiente perfecto para toda esta narración. Albert Solà y Andrea Mir encima del escenario acompañan a los protagonistas no solo con la música y las canciones, sino también con la actitud y las ganas de pasárselo bien con ellos y el público. Y las voces increíbles de Jiménez y Navarro se suman a una base muy auténtica.
Cada tema, compuesto por Miquel Tejada, es un pequeño regalo para cualquier amante de los musicales. Toca todas las teclas para que guste: letras que hablan en la oreja a la espectadora y ritmos que contagian el cuerpo y el corazón de movimiento. Salir con una de las melodías o canciones en la cabeza y repetirla sin darse cuenta es la prueba irrefutable que se ha conseguido el objetivo de mover y captivar al público.