Soy de las que, cuando hablamos de musicales, tengo la tendencia a huir de los grandes montajes para sumergirme en el pequeño formato, donde es más difícil engañar al público y la espectacularidad queda supeditada a la emoción.
Tick, tick… ¡boom! vuelve a demostrar que es así, que el buen perfume va en frasco pequeño, y que cuando tienes un reparto tan bueno como el que forman a Xavi Duch (Sugar), Lu Fabrés y Marc Pociello, acompañados de música en directo y con un libreto firmado por el autor de Rent, Jonathan Larson, no hace falta mucho más para acertar.