La productora Nico&Sunset parece decidida a revitalizar la comedia comercial del panorama teatral de Barcelona, aportando textos originales y una mirada fresca a una cartelera que tiende a repetir éxitos eternamente o programar espectáculos con cierto olor a naftalina. Después de las divertidas y juveniles Paradise y Be my baby, nos proponen una producción más ambiciosa, con más personajes y malentendidos cómicos, pero manteniendo el espíritu gamberro y la naturalidad. Oh, mami! es, pues, un vodevil efectivo en clave, esencialmente, femenina, donde el ritmo y la espontaneidad de las interpretaciones pasa por encima de cualquier tipo de verosimilitud o profundidad. Se trata de una historia que habla de la necesidad de liberarse y de disfrutar de los placeres de la vida, incluyendo algunas interesantes pinceladas dramáticas que, desgraciadamente, se muestran siempre desde una cierta distancia. Por lo tanto, la emoción y la reflexión quedan bastante tapadas por los gags que, por otro lado, resultan verdaderamente hilarantes. La mezcla de idiomas, un poco de slapstick, los diferentes enredos y la caricaturización de algunos secundarios consigue completar este retrato paródico de un grupo de gente de clase media y baja. Entre ellos, la actriz Betsy Turnez brilla especialmente con su carisma y dominio absoluto del género, arrancando al público las mejores y más grandes carcajadas. En definitiva, Oriol Vila y Raquel Salvador continúan haciendo crecer un sello artístico muy marcado y también saludable, ya que funciona, llena teatros y tiene margen, si así lo consideran, de tocar temas más sociales y dramáticos, sin salirse del registro. No les perdáis la pista.
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