El cabaret siempre es el contexto ideal para soltarse. El Barón de Maldà, Alfonso de Villalonga, ha montado uno a su medida para lanzar como una bomba su repertorio personal: canciones, frustraciones, historias familiares y las locuras más íntimas. No conocía Alfonso y vale la pena revisar su trayectoria: ha compuesto tanto bandas sonoras para Isabel Coixet o la excepcional Blancanieves de Pablo Berger, cómo ha publicado discos inspirados en la canción francesa.
El hilo argumental de La note d’à côté (qué nombre, madre mía) no importa demasiado. La historia va y viene como la vida de este showman de sangre azul, que defiende la importancia de tocar siempre la nota del lado. Lo acompaña uno equipo lleno de talento, y con unas voces preciosas: la Shica, Mónica López, Toni Comas (qué ‘Nessun Duerma’ se marca!!!!!), y dos músicos maravillosos.
Es difícil recomendar este espectáculo por un motivo concreto. Id: saldréis felices, con la sensación de haber visto una pequeña joya.