Excesos y carencias

Sergi Belbel: Fedra

Sergi Belbel: Fedra
11/02/2015

No se puede decir que este sea un mal espectáculo, porque no lo es. Tampoco se deben infravalorar las interpretaciones, porque hay de potentes y nos proporcionan algunas escenas memorables. Pero algo hace que no estemos ante un espectáculo redondo. Supongo que es el exceso de clasicismo -que va desde la escenografía y el vestuario hasta la misma concepción del montaje- y la ausencia de riesgo los que lastran una de las grandes apuestas de la temporada teatral.

Creo que Belbel hace un tiempo que está de pruebas con los grandes clásicos, ya sea con Beckett, Pinter o ahora Racine. Hace tiempo que no estreno textos propios y vemos, una temporada tras otro, como se acerca a autores que no había tocado antes… Agradecemos estas pruebas porque sabemos que es una fase que todo buen director debe pasar, ya sea con aciertos o con pequeños errores. Creo también que con la Fedra ha pecado de respetuoso y ha optado por rendirse a un texto exigente y peligroso. No se ha arriesgado con la puesta en escena y ha dejado que la palabra y el recitado del verso alejandrino hicieran el resto… En este sentido, la escenografía de Max Glaenzel, la iluminación de Kiko Planas o el vestuario de Mercè Paloma dotan al conjunto de momentos bellísimos, pero dejan una sensación de «deja vu» que no podemos obviar.

Respecto al apartado interpretativo, también parece que Belbel ha optado por el clasicismo… aunque el resultado es irregular. Tiene actores que tiran de una naturalidad aterradora -Mercè Sampietro o Jordi Banacolocha- y otros que se sueltan, en algunos momentos, por el abismo de la tragedia y la desmesura, como Lluís Soler, Xavier Ripoll o la misma Emma Vilarasau. Esto no impide, sin embargo, que esta última nos proporcione escenas de gran valor interpretativo. Recomendable, en todo caso, para todos aquellos que no quieran dejar pasar la ocasión de escuchar los versos de Racine en nuestros escenarios, lo que no suele ser nada habitual.

← Volver a Sergi Belbel: Fedra

¡Enlace copiado!