Por hacer una representación de estos entremeses de Cervantes tal como se hacían en el siglo XVI, divertidos, picantes, con música, danza, actuaciones descaradas, tocamientos, cabezas por debajo de las faldas… Los entremeses eran una especie de pantomima para divertirse y a fe que nos ha divertido. Dirección, vestuario, música, todo genial y también las actuaciones… Además algo poco habitual: los efectos especiales producidos «en directo». Hemos «visto» como hacían llover, golpes de picaporte, rayos y truenos, chirridos de portezuela, todo un espectáculo dentro del espectáculo. Rediós que bien me lo he pasado!
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