Las trampas de la poesía

Arbres

Arbres
15/11/2014

El currículum de Marc Artigau dentro de la nueva dramaturgia catalana (El balneari, Un mosquit petit, Aquellos días azules) es cada vez más extenso e importante. Con esta nueva pieza, sin embargo, la capacidad poética y figurativa del autor acaba resultando un lastre que ni el trabajo de los actores ni el elaborado clima escénico creado por Margherita Mantovani (escenografía) y Anna Espunya (iluminación) consiguen aliviar. Es cierto que la apariencia de thriller le aporta un aire interesante, pero luego cuesta mucho que el público entre en el hueso de la historia. Aquí estamos ante personajes solitarios y perdidos que buscan desesperadamente, a través de las mentiras y del engaño, un punto -terrenal o no- al que agarrarse… El bosque actúa como acertada metáfora, pero la opción de la ceguera y la sordera de los personajes centrales resulta tan obvia como ingenua.

En definitiva, este es un espectáculo más recomendable para amantes del relato con toques poéticos que del teatro más convencional. Aun así, y aunque el resultado se quede a medias, es encomiable el intento de plasmar en escena un mundo onírico tan peculiar y sugerente.

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