Sinopsis
Si algo ha caracterizado la trayectoria de la compañía El Martillo ha sido nuestro interés incansable para abordar temas universales desde una óptica política. Detectar qué estructuras utiliza el poder -capitalista, machista y de la derecha neoliberal- para mantenerse es un tema que nos ocupa y nos preocupa. Esta vez, sin embargo, queremos ir más allá y, en lugar de limitarnos a analizar otra de estas instituciones que nos dominan y nos controlan, queremos abordar el espacio en que estas clavan sus raíces con una mayor eficacia. Y este -según nuestro entender- no es otro que el terreno fértil de nuestra infancia.
Efectivamente, la niñez es una etapa absolutamente vulnerable, que, si abonamos de forma adecuada, puede el ser el campo de cultivo perfecto donde crezcan las ideas que sustenten la futura sociedad. Y, ahora que somos conscientes de que actual-mente nos encontramos inmersos en una sociedad donde priman los intereses económicos, el poder del hombre y las diferencias de clases, si hacemos revisión de la infancia que hemos tenido podremos detectar que la semilla de todos estos valores nos la sembraron entonces. Y si es cierto que, como decía el Dr. Seuss, “Los adultos no somos más que niños obsoletos”, esta revisión de nuestro primer contacto con la vida resulta inevitable.
O es que cuando decíamos gorda a nuestra compañera de clase no manifestábamos, por primera vez, el sometimiento a unos determinados cánones estéticos? O es que cuando pedíamos a los padres que nos compraran unas zapatillas de marca no intentábamos evitar ser discriminados por nuestra clase social? O es que cuando assetjàvem el empollon de la clase no era, en el fondo, el reflejo de una sociedad que, en lugar del cooperativismo, fomenta la competitividad?
