Edipo (a través de las llamas) es un espectáculo que revisa la tragedia clásica con adaptación y versión de Paco Bezerra y dirección de Luis Luque.
Sinopsis
Edipo duerme, al borde de un camino, hasta que despierta al escuchar la voz de una extraña presencia; un hombre, que, oculto bajo un casco de metal, comienza a hablarle acerca de un monstruo, una ciudad y una recompensa.
Edipo, desconfiado, rechaza la invitación del misterioso caballero, que no duda en seguir insistiendo hasta conseguir que Edipo se desvíe de su camino, se enfrente al monstruo y, convertido en rey, termine entrando en la ciudad de Tebas.
Castellano
No recomendado para menores de 14 años
Edipo duerme, al borde de un camino, hasta que despierta al escuchar la voz de una extraña presencia; un hombre, que, oculto bajo un casco de metal, comienza a hablarle acerca de un monstruo, una ciudad y una recompensa.
Edipo, desconfiado, rechaza la invitación del misterioso caballero, que no duda en seguir insistiendo hasta conseguir que Edipo se desvíe de su camino, se enfrente al monstruo y, convertido en rey, termine entrando en la ciudad de Tebas.
- Alejo Sauras
Edipo - Mina El Hammani
Yocasta - Julia Rubio
Esfinge - Eduardo Mayo
Yelmo - Jiaying Li
Tiresias - Alejandro Linares
Mensajero - Diego Rodríguez
Creonte - Omar Zaragoza
Esclavo
- Dirección:
Luis Luque - Título original:
Edipo (a través de las llamas) - Autoría:
Paco Bezerra - Composición musical:
Mariano Marín - Año del texto:
- Ayudantía de dirección:
Álvaro Lizarrondo - Escenografía:
Mónica Boromello - Iluminación:
Juan Gómez-Cornejo - Audiovisuales:
Bruno Praena - Vestuario:
Almudena Rodríguez Huertas - Coreografía:
Sharon Fridman - Fotografía:
Jesús Ugalde - Producción:
Festival de Mérida
Pentación
Teatro Español - Año de la producción:
- Manuel Zuloaga JiménezTeatre Barcelona
- Irene Herrero MiguelTeatre Barcelona
- JOSE GABRIEL DEL VIEJO
Nota del autor: Paco Bezerra
Jesús de Nazaret marchó al desierto, durante cuarenta días, y a su regreso volvió con un mensaje que cambió el mundo. Buda, en silencio, se sentó debajo de un árbol hasta que recibió una enseñanza con la que iluminó al continente asiático. Moisés atravesó un desierto, subió hasta una montaña y, tras su descenso, fundó una nueva sociedad. Todas estas figuras y mitos ancestrales tienen en común el esfuerzo, el sacrificio y la renuncia. ¿O acaso es posible cambiar el mundo de otra manera? Para ser considerado un héroe, uno ha de sacrificar una parte muy importante de sí mismo. Y no sólo eso, además, ha de crear algo nuevo y próspero. Exactamente lo que hizo Edipo, que se convirtió en mito en el momento en que decidió descubrir la verdad para salvar del exterminio a su pueblo ‐aunque, tomando tal decisión, le terminara sobreviniendo la mayor de las desgracias‐. El mito es un relato fundacional que, al tiempo que, a través de los símbolos, nos explica el orden del mundo, también nos plantea un interrogante; una pregunta que nos señala a cada uno de nosotros y nos compromete a todos: ¿Quién es el valiente que, hoy en día, se atrevería a seguir apostando por la verdad, a pesar de saber que esa verdad le puede acabar perjudicando? ¿Quién es el valiente que, hoy en día, se atrevería a luchar por el bien de una comunidad, a pesar de saber que sus privilegios podrían verse mermados? ¿Quién es el valiente que, hoy en día, se atrevería a preguntarse, cada vez que se levanta: <<quién soy y qué he venido a hacer a este mundo>>? Sí, éstasson algunas de lastantas y tantas preguntas que, desde la antigüedad, nos sigue lanzando esta particular historia: ¿Quién es el valiente que, hoy en día, se atrevería a ser Edipo? – Paco Bezerra