Este miércoles 11 de enero, el teniente de alcaldía de Empresa, Cultura e Innovación, Jaume Collboni, y la concejala de Ciutat Vella, Gala Pin, han anunciado los detalles del acuerdo para adquirir por parte del Ayuntamiento el Teatro Tantarantana y su incorporación a la red de Fábricas de Creación.
«Queremos salvar más que un teatro; el Tantarantana es un espacio de creación importante para el barrio y las compañías jóvenes arraigado en la ciudad «, asegura Jaume Collboni. La concejala del distrito, Gala Pin, explicó que el alquiler del Ático 22, parte importante del proyecto del teatro, vence el próximo mes de junio y que la presión inmobiliaria que sufre la ciudad amenazaba la continuidad del proyecto. De este modo, tras la alerta del actual equipo de gestión de El Tantarantana, han decidido comprar todo el edificio. El teatro incorporará a las dos salas actuales, el Bajos 22 y el Ático 22, el segundo piso del inmueble, actualmente propiedad de una empresa de actividades recreativas que, en opinión del consistorio, no tiene lugar en el futuro proyecto .
El teatro pasará a formar parte de la red de Fábricas de Creación, como ya se ha hecho en los últimos años con la Nau Ivanow o el Ateneu Popular de Nou Barris. El equipo de gobierno ha destacado la labor de El Tantarantana en relación con el barrio del Raval y las escuelas del entorno, además de la creación de públicos. De este modo, entienden la compra del teatro como «el retorno a la ciudadanía de un espacio dedicado a la acción social y comunitaria».
El Ayuntamiento abrirá un concurso público las próximas semanas para adjudicar la gestión del teatro a un equipo que ya tendrá que trabajar en la programación de la temporada 2017-18. El coste de adquisición del edificio es de 1,3 millones de euros, a lo que habrá que sumar las posibles obras de adaptación del espacio.
El teatro inició su actividad en 1992. Primero con un local en situado en la calle Tantarantana del que tomaba el nombre. El actual espacio teatral ubicado en la calle de las Flores del barrio del Raval abrió las puertas en 1996 y tiene una capacidad para más de 100 espectadores.
