La Badabadoc acoge la obra El nom volgut, seleccionada en la convocatoria On el teatre batega 2024. Una pieza tierna y conmovedora que habla de Lua, quien, después de comprender y compartir con sus compañeros y compañeras de clase que es una persona con trastorno del espectro autista, se enfrenta a una nueva revelación: quiere que todos la llamen Elio.
Impulsado por la admiración a El Petit Príncep, Pau Coya, el autor de esta pieza, escribe la historia de la protagonista desde el punto de vista de un adulto, su padre, que está acompañado por la madre de Mia, la mejor amiga de Lua. “Todos los niños son personajes ausentes en la obra. […] Es bonito ver cómo el padre duda, pero en ningún momento deja de luchar”, explica el dramaturgo.
Aunque Pau Coya no descarta acabar dirigiendo alguna de sus obras, este montaje teatral cuenta con la dirección de Rebeca Del Fresno, amiga y compañera de confianza con quien fundó la compañía La Permanent en Mallorca y con quien ha trabajado en otras obras suyas como Kryptonita o Cavallet de mar. Vanessa Segura i Àlvar Triay interpretarán, dando voz, figura y carácter a esta historia que explora cuál es la doble violencia que puede sufrir un menor por ser neurodivergente y trans a través de la vivencia de los adultos que le acompañan.
Después de la gran acogida de su última obra, Pols de diamant, pieza que le ha llevado a ganar el Premio de la Crítica 2024 como Mejor autor revelación y el premio a Mejor espectáculo de proximidad en los Premios Teatre Barcelona 2024, la nueva obra de Pau Coya aterriza en una sala llena de intimidad. Ante esta oportunidad, el dramaturgo asegura que la historia se ha escrito con tanto cuidado y delicadeza que es apta para un público familiar: “Las anteriores obras que he escrito tienen un punto transgresor que expone temáticas que pueden ser incómodas. Esta se presenta como un soplo de aire fresco abierto a un público mucho más transversal”.
“Me gustaría que el espectador se convierta en un acompañante de este padre que, aunque está medio perdido ante una situación que se le hace un mundo, lucha por hacer las cosas bien”. Con esta ilusión, el autor de la obra El nom volgut desea llevarla al mayor número posible de teatros catalanes y baleares. La historia de Elio, que no se basa en ningún caso concreto, está preparada para dar visibilidad y normalizar de la manera más dulce y sensible las infancias autistas que descubren su identidad de género.
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