Una inauguración con personalidad

Wonderland

Wonderland
03/07/2014

La compañía estadounidense Galli Dance ha sido la encargada de inaugurar el Festival Grec de este año con uno de esos espectáculos que saben cómo llenar el gran escenario del anfiteatro de Montjuïc. A pesar de tratarse de una obra apta para todo tipo de públicos, quizás hubiera sido más aplaudido un espectáculo de danza que tuviera un lenguaje mucho más accesible para aquellos que no están acostumbrados. No obstante, es de agradecer el pequeño riesgo asumido por Ramon Simó de programarlo en la inauguración, dotando así de personalidad al festival y no primando exclusivamente la parte superficial del mismo, la cual siempre resulta más complaciente de cara a la galería, pero también la más impersonal.

El espectáculo explora el instinto de rebaño del ser humano a través de un conjunto de piezas que mezclan un compendio de sentimientos positivos y negativos hacia este. Así, los primeros son reflejados con una gran belleza a partir de movimientos corales que dotan al espectáculo de gran dinamismo y brillo. De hecho, las coreografías de estos segmentos son realmente apoteósicas y aprovechan al máximo las partes musicales que las acompañan, las cuales aportan comicidad, ritmo y armonía. Por el contrario, las piezas que reflejan la parte negativa de este instinto de rebaño resultan ser más densas y, a menudo, un poco aburridas por su monotonía y excesiva dilatación. Naturalmente, esto no sucede en todos los pasajes, pero estos a menudo no acaban de encontrar su propio tempo en el conjunto del espectáculo, lo cual lo ensombrece un poco. No obstante, alguno de estos nos aportan algunas de las reflexiones más interesantes del espectáculo y también una puesta en escena muy interesante.

Así pues, este inicio de festival nos trae un espectáculo con una gran técnica artística que despunta sobre todo en las grandes coreografías corales ejecutadas por sus excelentes bailarines. Por tanto, a pesar de las imperfecciones que se le puedan encontrar, estamos ante un espectáculo sugerente y atractivo, que inicia este festival de una forma más que positiva.

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