Yo no acostumbro a ver demasiados espectáculos de payasos pero este me ha parecido exquisito. Hablo desde la total ignorancia pero desde la franqueza más absoluta: reí y mucho (y los que estabais conmigo viéndolo también. Que os oía!)
El mundo que nos plantea en Toti Toronell es caseramente delirante. Hasta ahora, ir a sacar la basura, fregar el suelo o arreglar una gotera me habían parecido siempre actos banales, sin ningún tipo de dramatismo ni poética. Ahora todo lo contemplo con unos ojos diferentes. Gracias a Naïf he vuelto a ver cosas que, por rutinarias, hacía mucho que no veía. Con un estilo que a menudo recuerda a grandes maestros del género y que a la vez es capaz de arriesgarse e innovar.
También debo que decir que el uso de la pantalla con elementos proyectados y algunos sonidos rompían un poco con la estética propuesta. Sin embargo es un problema menor si lo comparamos con el excelente uso de música en directo de la mano de Albert Dondarza. Ésta crea una atmósfera que te seduce desde el primer momento y hace más intensa y cercana la actuación de en Toti.
Espero que tengáis una tarde para dejar volar vuestra imaginación de la mano de este gran payaso. Os lo agradeceréis.