Esto opinaba yo de Romeu y Julieta del bardo de Stratford, pero hoy me han hecho dudar, porque lo que he visto en el Teatre Akadèmia bajo la dirección de Dugald Bruce Lockhart, un «propeller» que aterrizó en Barcelona, me ha parecido brutal. Muy al estilo de la casa, ha metido un cohete en el culo de los actores, y hemos disfrutado de una función dinámica pero respetuosa con los recitados. A partir de un casting muy acertado, y un aprovechamiento del espacio «muy particular» del Akadèmia, la obra ha fluido como una riada imparable. Magnífica dirección que ha llevado a los actores a la excelencia. La música y las coreografías nos ha transportado al estilo de teatro que se hacía en el renacimiento. No os la perdáis. Una ocasión única para ver un Shakespeare desde un punto de vista diferente al que estamos acostumbrados y muy, pero que muy, interesante.
¡Enlace copiado!