“La bufanda” es la demostración que la combinación de danza y teatro, cuerpo y voz se complementan de tal manera que la historia adquiere otra dimensión, más real, más cercana y también más profunda. La idea y la interpretación son de Oriol Roca. La bufanda es un elemento que nos abriga y conforta pero también nos puede ahogar y destruir. Es un bonito símbolo del amor.
Oriol Roca habla con los ojos, con los pies, con todo el cuerpo y nos habla de una historia, de su historia, de encuentros y pérdidas, de amores y olvidos. Es la expresión de los sentimientos, de la emoción, de la sorpresa, del dolor y del sufrimiento. Todo ello tejido con un sentido muy fino de humor y una conexión con el público que resulta más cercana en este espacio íntimo y mágico de la Badabadoc.
Utiliza pocos elementos pero muy visuales como la arena que da mucho juego a una de las escenas. Con un diseño muy especial, Llorenç Parra realza con las luces la danza trágica del dolor y la desesperación en la que el actor cae, se mezcla y se funde con la tierra.
Como Sol Picó con las plumas, Oriol Roca juega con una o varias sillas en el escenario como si fuera una prolongación de su excelente expresión corporal.
No se necesita voz en off per imaginarnos al segundo personaje. Está allí y nos hace partícipes de su presencia. Oriol Roca lo es todo, el presente, el pasado y la manera de resolver su dolor.
Es un bombón de obra que no se puede perder. Ayer estrenaron. Le auguramos una larga vida.