La adaptación de la novela de Joan Sales Incerta glòria es uno de aquellos grandes proyectos a que nos tiene acostumbrados Àlex Rigola. Una cruda historia sobre la Guerra Civil habitada por personajes complejos y caleidoscópicos. De hecho, lo mejor del montaje es, sin duda, el reparto. Un equipo impecable que da vida con energía y matices a estos personajes.
El conjunto, sin embargo, es irregular. Una primera parte un poco confusa y atropellada (por la necesidad de presentar mucha información en muy poco tiempo), una segunda parte preciosa e intimista y una tercera parte que combina momentos brillantes con otros, de nuevo, confusos. Una puesta en escena con cierto exceso de elementos simbólicos y un uso un poco discutible de la danza contemporánea completan un montaje ambicioso que resulta interesante pero que, a mí, no me acabó de convencer.