Manuela Infante es una de las muchas mujeres, dramaturga y directora que han aparecido en los últimos años en la escena teatral. Con 42 años ya es reconocida internacionalmente. Una de sus obras “Estado vegetal” fue programada en julio de 2019 en la Biennale di Venezia y esta producción del Teatre Nacional, “Fuego, fuego” nos confirma la valía de esta chilena que busca formas experimentales de dramaturgia. Ella hace búsquedas sobre todo aquello que no es humano llevando a cabo un teatro post-antropomórfico. Con “Estado Vegetal” investiga, dialoga con el mundo vegetal y actualmente está trabajando en una obra sobre las piedras y el mundo mineral. En esta línea no humana, nos presenta esta obra en la que el fuego es el protagonista, el fuego es el actor y la actriz, el vehículo que utiliza Infante para mostrar las miserias de la humanidad.
En el mismo camino para dar personalidad a objetos vivos no humanos, Infante habla del fuego en todos sus aspectos, des de la vida que produce hasta la destrucción que provoca. Utiliza el fuego para hablar del peligro de las construcciones de madera de pino, de la explotación de las tierras y de las personas, de las piras de castigo infligido a las brujas por miedo a su poder y a su sabiduría, del fuego para demostrar descontento, desengaño o ira. El fuego nos habla también de algun drama como el ecológico. La autora aprovecha para criticar a los medios de comunicación, a los periodistas de la compasión, a los opinólogos sin fundamento.
En diferentes espacios del mismo escenario, los intérpretes Héctor Morales y Núria Lloansi van desarrollando los temas bajo la presencia del fuego con un lenguaje inconexo, abstracto y repetitivo que actúa de hilo de unión. Todo ello con una escenografía e iluminación impactantes de Andrés Poirot. Los ruidos son muchas veces enloquecedores como lo es la rabia. En el silencio que se produce después del incendio, los personajes, con movimientos robóticos acompañados de la música electrónica de Diego Noguera, parecen atrapados por una corriente eléctrica. El lenguaje corporal y musical son también críticos con la mala utilización del fuego por la humanidad. Agradecemos al TNC la propuesta digital de algunas de las obras de la cartelera de este año con una excelente grabación.