En una coproducción entre Toulouse y el Liceu, soñada por Jordi Savall, Le Ballet de l’Opéra national du Capitole de Toulouse regresa al escenario del Gran Teatre del Liceu para recrear desde el gesto el mundo sensible y lleno de matices de la música de Gluck. El aclamado coreógrafo Edward Clug se pone al frente de la compañía para poner color a estas impresionantes partituras.