Bonne, Belle, Douce

Sinopsis

Bonne, Belle, Douce es un proyecto de creación que nace de la lectura de Las Criadas de Jean Genet. El autor se preguntó en su época sobre la identidad y los roles sociales y la pieza hace lo propio para plasmar ese discurso alrededor de preguntas que han ido surgiendo a lo largo del proceso de creación: ¿quién soy? ¿quién soy en relación al otro? ¿cuáles son los mecanismos que me permiten constituir mi supuesta identidad absoluta o por el contrario destruirla? El cuerpo se convierte en correlativo de una lucha entre individuo y poder; entre yo (alguien) y yo (nadie). Un intenso trabajo corporal permite hacer más presente lo que se quiere transmitir. El trabajo textual trasciende a un plano más físico, llegando incluso a sustituir la palabra por el gesto (danzado, violentamente lanzado, harmonioso en sus formas y cruel en su contenido). Contrastes rítmicos, fragmentación y repetición son una constante dentro del trabajo físico de los intérpretes.

Alejandro Curiel estudió interpretación en la Escuela de Arte Dramático de Valladolid, completando su formación en danza contemporánea y teatro visual. En Barcelona trabaja como actor y se especializa en dirección escénica en el Institut del Teatre, colaborando en diversas producciones de pequeño formato.

Sinopsis

Bonne, Belle, Douce es un proyecto de creación que nace de la lectura de Las Criadas de Jean Genet. El autor se preguntó en su época sobre la identidad y los roles sociales y la pieza hace lo propio para plasmar ese discurso alrededor de preguntas que han ido surgiendo a lo largo del proceso de creación: ¿quién soy? ¿quién soy en relación al otro? ¿cuáles son los mecanismos que me permiten constituir mi supuesta identidad absoluta o por el contrario destruirla? El cuerpo se convierte en correlativo de una lucha entre individuo y poder; entre yo (alguien) y yo (nadie). Un intenso trabajo corporal permite hacer más presente lo que se quiere transmitir. El trabajo textual trasciende a un plano más físico, llegando incluso a sustituir la palabra por el gesto (danzado, violentamente lanzado, harmonioso en sus formas y cruel en su contenido). Contrastes rítmicos, fragmentación y repetición son una constante dentro del trabajo físico de los intérpretes.

Alejandro Curiel estudió interpretación en la Escuela de Arte Dramático de Valladolid, completando su formación en danza contemporánea y teatro visual. En Barcelona trabaja como actor y se especializa en dirección escénica en el Institut del Teatre, colaborando en diversas producciones de pequeño formato.

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