Don Quijote del Ballet de Catalunya, una visión original, bajo la dirección artística de Elías García y Larissa Lezhnina. Conservador, pero a la vez innovador, nuestro Quijote ofrece un paisaje de la danza clásica que se enriquece doblemente con la presencia del flamenco y la danza española.
Sinopsis
El Ballet de Catalunya se adentra en la España manchega, aragonesa y en la capital catalana, Barcelona. Todos ellos son escenarios de una de las obras más carismáticas de la literatura española, convertida en uno de los clásicos del repertorio donde el ballet se impregna de una gran riqueza folclórica y abundan la fiesta de las tabernas y las grandes pasiones escondidas.
Bajo la dirección artística de Elias Garcia y Larissa Lezhnina, Don Quijote del Ballet de Cataluña es adaptado a un formato con personalidad propia, con el que se ha querido condensar la historia, con la danza como eje principal y motor de toda la trama fácilmente inteligible haciendo uso de proyecciones y narraciones que sitúan al espectador en todo momento.
La Obra es presentada en 2 Actas, en lugar de los 4 que originariamente la conforman. La adaptación que hacen los directores artísticos permiten su comprensión a un amplio abanico de audiencias que no necesariamente deben haber leído la obra de Cervantes ni conocer la coreografía de Petita.
El Ballet de Cataluña interpreta una versión que, a diferencia de la producción original basada en el libreto de Marius Petipa, se desarrolla en un entorno particular a la hora de contar con la presencia de textos escogidos con esmero que ofrecen una lectura fiel de esta historia apasionada . Asimismo se suprime la pantomima y se traslada todo el protagonismo a la danza, con el objetivo de intensificar las emociones y el dinamismo tan característicos y que se muestran condensados gracias a la interpretación de los cerca de 25 bailarines que componen actualmente el Ballet de Catalunya .
Un Quijote que además cuenta con la participación de bailarines de danza española y escuela bolera mostrando una mayor autenticidad y pertenencia a la cultura de nuestro país ya sus orígenes e influencias.
Una obra en la que la nueva compañía catalana quiere poner de manifiesto una personalidad y sello propios, que ofrecen una visión original, con el estilo y el virtuosismo de sus bailarines, pero que por encima de todo no quiere desvirtuar la autenticidad que exige un Quijote. Emoción, pasión y acción están aseguradas, ofreciendo al público asistente una nueva adaptación personal y al mismo tiempo fiel a su autoría y repertorio.
El Ballet de Catalunya se adentra en la España manchega, aragonesa y en la capital catalana, Barcelona. Todos ellos son escenarios de una de las obras más carismáticas de la literatura española, convertida en uno de los clásicos del repertorio donde el ballet se impregna de una gran riqueza folclórica y abundan la fiesta de las tabernas y las grandes pasiones escondidas.
Bajo la dirección artística de Elias Garcia y Larissa Lezhnina, Don Quijote del Ballet de Cataluña es adaptado a un formato con personalidad propia, con el que se ha querido condensar la historia, con la danza como eje principal y motor de toda la trama fácilmente inteligible haciendo uso de proyecciones y narraciones que sitúan al espectador en todo momento.
La Obra es presentada en 2 Actas, en lugar de los 4 que originariamente la conforman. La adaptación que hacen los directores artísticos permiten su comprensión a un amplio abanico de audiencias que no necesariamente deben haber leído la obra de Cervantes ni conocer la coreografía de Petita.
El Ballet de Cataluña interpreta una versión que, a diferencia de la producción original basada en el libreto de Marius Petipa, se desarrolla en un entorno particular a la hora de contar con la presencia de textos escogidos con esmero que ofrecen una lectura fiel de esta historia apasionada . Asimismo se suprime la pantomima y se traslada todo el protagonismo a la danza, con el objetivo de intensificar las emociones y el dinamismo tan característicos y que se muestran condensados gracias a la interpretación de los cerca de 25 bailarines que componen actualmente el Ballet de Catalunya .
Un Quijote que además cuenta con la participación de bailarines de danza española y escuela bolera mostrando una mayor autenticidad y pertenencia a la cultura de nuestro país ya sus orígenes e influencias.
Una obra en la que la nueva compañía catalana quiere poner de manifiesto una personalidad y sello propios, que ofrecen una visión original, con el estilo y el virtuosismo de sus bailarines, pero que por encima de todo no quiere desvirtuar la autenticidad que exige un Quijote. Emoción, pasión y acción están aseguradas, ofreciendo al público asistente una nueva adaptación personal y al mismo tiempo fiel a su autoría y repertorio.
- Dirección:
Leo Sorribes - Libreto:
Marius Petipa - Dirección artística:
Elias Garcia
Larissa Lezhnina - Dirección técnica:
Alberto Rodríguez - Bailarines/as:
Kimin Kim
Yukari Mizu
Adam Ashcroft
Ellen Mäkelä
Mariane Francioli
Cristo Vivancos
Mariane Francioli
Beatriz Nunes Costa
Sara Esposito
Ellen Mäkelä
Masayoshi Sato
Carlos Lopez
Paul Faure - Escenografía:
Alberto Torres
Jose Urcia - Iluminación:
Alberto Rodríguez - Vestuario:
Martina Montorfani
Eva Gomez - Coreografía:
Marius Petipa - Música:
Ludwig Minkus - Producción:
Carmen Tanaka