El autor y director Oriol Morales i Pujolar habla en Com es moren els ocells sobre una emoción universal que llega de imprevisto: el miedo a la muerte, pero también el miedo al momento vital, que es aquella emoción que experimenta alguien que vive inmerso dentro de la vorágine imparable del capitalismo occidental.
Sinopsis
Eugeni duerme en casa de Abel, un chico a quien ha conocido esta misma noche. Cuando consigue dormirse le suena el teléfono. Sale al comedor para cogerlo, en un piso extraño que no conoce. Al descolgar su tía, Carme, una mujer con un fuerte acento del Delta, le dice que su madre se ha muerto. Unos días después Eugeni sale del tanatorio con las cenizas de su madre. Anda por la ciudad hasta llegar a su piso de Gracia, donde vive solo. Sentado en el sofá con las cenizas de su madre delante, es cuando se da cuenta. Eugeni se da cuenta que un día se morirá él también.
Este hecho lleva a Eugeni a un viaje interior en el cual aprenderá a convivir con la soledad y con el miedo, a entender su lugar en el mundo y a aceptar todas las decisiones que lo han llevado hasta aquí. Eugeni se da cuenta que necesita entenderse, a él y a sus miedos, y que no será hasta que esto pase que podrá tomar una decisión sobre un hecho que ahora lo preocupa: qué hacer con las cenizas de su madre.
Finalmente, Eugeni vuelve al Delta, al lugar donde nació su madre, y se adentra por la noche en la Isla de Buda. Se sienta y espera que se haga de día con las cenizas de su madre dentro de una urna que ya tiene medio abierta.
Eugeni explica todo esto al público desde el escenario, compartiendo con ellos un aquí y ahora que crea una sensación de fuego y comunidad. Porque es Eugeni quien ha decidido explicar él mismo esta historia y ha decidido hacerlo así.